Como resultado, las empresas a menudo sobreestiman su propia fuerza y juzgan mal el mercado de la restauración, lo que da como resultado que las empresas ataquen por todos lados, sean restringidas por todos lados y luego caigan en una situación de asedio por todos lados. Por lo tanto, en este punto, los gerentes de catering deben tener una comprensión y un concepto global de su propia empresa de catering como un carpintero para poder ser un buen consultor para el jefe. Finalmente, los carpinteros siempre utilizan sus propias acciones reales para realizar creativamente sus ideas, en lugar de limitarse a hablar y no hacer. Por lo tanto, los responsables de catering deben utilizar sus acciones reales para contagiar y expulsar a todos los empleados.