La epidemia en Malasia está fuera de control y fábricas como Bosch y Nissan han suspendido la producción.
Anteriormente, se informó que Nissan Motor Co. cerró temporalmente la línea de producción en su gran planta de ensamblaje en Smyrna, Tennessee, hasta fin de mes debido a un brote de neumonía por el nuevo coronavirus en una Fábrica del proveedor de chips en Malasia. Nissan North America no reveló el nombre del proveedor específico, pero dijo que la fábrica detendrá la producción durante la semana del 16 y 23 de agosto, y actualmente planea reiniciar la línea de producción el 30 de agosto.
Actualmente, debido a la recurrencia de epidemias en el extranjero, la fecha de envío de chips aún se está ampliando. Según la última investigación de Haina International Group, el ciclo de entrega de chips (la diferencia de tiempo entre el pedido de semiconductores y la entrega) aumentó en más de 8 días en julio respecto a junio, y ahora ha alcanzado las 20,2 semanas, que es la espera más larga desde que la compañía Comenzó a rastrear datos relevantes en 2017. El tiempo más largo.
Debido a la escasez de chips, la industria del automóvil ha sufrido enormes pérdidas en su capacidad de producción. Los datos de AutoForecast Solutions muestran que, hasta el 9 de agosto, las pérdidas mundiales de producción de automóviles debido a la escasez de chips alcanzaron los 5,853 millones de vehículos, de los cuales América del Norte y Europa tienen las mayores pérdidas, 6,5438+08,7 millones de vehículos y 6,5438+0,74 millones de vehículos respectivamente, seguidos por China posteriormente fue de 654,38+012.200 vehículos. AutoForecast Solutions predice que la pérdida final de producción anual mundial de vehículos puede aumentar aún más a 7 millones de vehículos.
Esto significa que la falta de núcleo seguirá afectando el funcionamiento normal de la industria automotriz durante algún tiempo, y es probable que continúe hasta el próximo año. Anteriormente, Infineon y NXP, los dos mayores fabricantes de chips para automóviles del mundo, dijeron que la oferta y la demanda de chips no se equilibrarán hasta mediados del próximo año. Recientemente, Sun Ye, que proporciona servicios de embalaje y pruebas para fabricantes de chips, cree que la escasez de chips continuará en 2022 y que el suministro limitado de chips seguirá siendo un desafío al que se enfrentan muchas industrias.