¿Cuáles son los efectos nocivos del trabajo prolongado con plomo en el cuerpo humano?
El plomo tiene el impacto más severo en el neurocomportamiento.
Las manifestaciones clínicas comunes del impacto del plomo en el neurocomportamiento de los niños son el comportamiento hiperactivo de los niños: atención distraída, impulsividad y actividad excesiva. Esto se debe a que el envenenamiento por plomo puede causar excitación cerebral y disfunción de la inhibición; inactivar y desnaturalizar las proteínas de la actividad cerebral, provocando la muerte de ciertas células cerebrales y deteniendo las actividades funcionales relacionadas, destruyendo la barrera hematoencefálica, permitiendo que fluya demasiada agua y venenos en la sangre; ingresan al tejido cerebral, causando edema cerebral; impidiendo que el desarrollo neuronal se sincronice, destruyendo la estructura de la red cerebral y causando disfunción de integración y coordinación.
El plomo puede obstaculizar el desarrollo y crecimiento de los niños
El plomo puede provocar que el crecimiento físico de los niños se retrase; provocar que el bajo estado nutricional de hierro, zinc y calcio afecte directamente al organismo; respuesta de la hormona estimulante de la tiroides a la hormona estimulante de la tiroides La reacción de las hormonas liberadoras provoca un trastorno de la secreción de la tiroides, afectando así las actividades fisiológicas y metabólicas normales de los niños.
El envenenamiento por plomo puede causar disfunciones sensoriales
como ambliopía, edema de retina, neuritis retrobulbar, puntos ciegos, parálisis del músculo abductor, atrofia óptica, trastornos del movimiento ocular y anomalías de la acomodación pupilar. ambliopía o cambios en el campo visual; o trastornos del olfato, del gusto, etc.
El envenenamiento por plomo provoca anemia en los niños
Los principales efectos del plomo en el sistema sanguíneo son inhibir la síntesis de hemoglobina y acortar la vida de los glóbulos rojos en la circulación. Los efectos eventualmente conducirán a la anemia.
El envenenamiento por plomo daña muchos otros sistemas.
Por ejemplo, trastornos del sistema digestivo, como problemas estomacales; desequilibrio del ejercicio o reacción lenta; disminución de la función renal y cardiovascular, afectando la salud reproductiva y otros; fenómenos.