Haz lo que quieras y no vayas más allá del momento: el equilibrio entre libertad y moderación
El equilibrio entre libertad y moderación debe considerarse desde los siguientes aspectos:
1. Autodisciplina
Necesitamos autodisciplina para poder hacerlo. controlarnos mejor. La autodisciplina incluye el autocontrol y la autogestión. Autocontrol significa controlar tus emociones, comportamiento y palabras y no dejar que se salgan de control. La autogestión consiste en gestionar bien el tiempo, la energía y los recursos y no permitir que se desperdicien ni se abuse de ellos.
En segundo lugar, las limitaciones sociales
Las limitaciones sociales significan que debemos respetar las normas, leyes y regulaciones sociales. Para mantener el orden social y los intereses públicos, estas normas, leyes y reglamentos están especialmente formulados. Necesitamos cumplir con estas normas, leyes y regulaciones para garantizar la estabilidad y seguridad de la sociedad.
En tercer lugar, las limitaciones morales
Las limitaciones morales significan que debemos respetar las normas morales. Las normas éticas se refieren a códigos de conducta y valores socialmente aceptados. Necesitamos respetar estos principios morales para poder mantener un buen carácter e imagen moral.
Cuarto, juego libre
El juego libre significa que debemos ejercer nuestra creatividad y personalidad bajo la premisa de autocontrol, control social y control moral. Necesitamos respetar nuestros propios intereses y pasatiempos y aprovechar al máximo nuestras fortalezas y ventajas, para que podamos realizar nuestra autoestima y realizarnos a nosotros mismos.
Quinto, relajación moderada
La relajación moderada significa que necesitamos relajarnos adecuadamente bajo la premisa de autocontrol, control social y control moral. La relajación nos permite ajustar mejor nuestra mentalidad y mejorar la eficiencia laboral y la calidad de vida.
Sexto, compensaciones
Necesitamos hacer una elección equilibrada entre libertad y limitaciones. A veces necesitamos renunciar a cierta libertad para cumplir con normas sociales y estándares morales. A veces necesitamos dejar de lado algunas limitaciones para desarrollar nuestra creatividad y personalidad. Sólo sobre la base de compensaciones se puede lograr un equilibrio entre libertad y moderación.