Red de Respuestas Legales - Asesoría legal - ¿Qué significa gestión sin causa?

¿Qué significa gestión sin causa?

La gestión sin causa se refiere al comportamiento de gestionar voluntariamente asuntos o proporcionar servicios a otros para evitar dañar sus intereses.

Definición básica:

La gestión sin causa se refiere a un hecho jurídico en el que las partes no tienen obligaciones estatutarias o pactadas, pero realizan gestión o servicios con el fin de evitar la pérdida de los intereses. de otros. El comportamiento de gestión sin causa es un acto espontáneo y el administrador sin causa tiene la obligación de gestionarlo adecuadamente. Los derechos e intereses legítimos del administrador sin causa deben protegerse de manera oportuna.

En la gestión sin causa, la persona que gestiona los asuntos de otros se llama gerente, y la persona que es gestionada por otros se llama él mismo. Generalmente el administrador es el acreedor y yo el deudor.

Derechos e intereses básicos:

Una vez establecida la gestión libre de causa, el administrador no puede exigirme el pago de una remuneración, pero tiene derecho a exigirme que corra con los siguientes gastos: reembolsar al administrador los gastos necesarios para la gestión de la empresa y los intereses, principalmente gastos directos. Cuando el administrador asuma la deuda necesaria por mí, saldaré la deuda. Cuando el gerente sufre pérdidas debido a asuntos de gestión, yo soy responsable de la compensación.

Características básicas de la gestión sin causa:

1. La gestión sin causa es el comportamiento de gestionar los asuntos de otras personas.

Un administrador debe gestionar por sí mismo ciertos asuntos, ya sea la conservación, mejora, utilización o disposición de la propiedad. El comportamiento del administrador en la gestión de los asuntos es un comportamiento fáctico, no un comportamiento legal.

2. La gestión sin causa debe ser en beneficio de los demás.

En términos generales, los directivos deben tener como propósito buscar beneficios para los demás. Desde la perspectiva de la motivación, la gestión de los directivos debe servir a los intereses de los demás. Desde la perspectiva de sus efectos, los beneficios obtenidos del comportamiento directivo los disfrutan en última instancia ellos mismos. Si un administrador administra los asuntos de otros para beneficio propio o de un tercero distinto de él mismo, no constituye administración sin causa.

3. El administrador no tiene obligación legal de gestionar los asuntos ajenos.

Si el administrador tiene un acuerdo consigo mismo para administrar los asuntos, o la ley estipula que el administrador tiene la obligación de administrar los asuntos de otros, esto no constituye administración sin causa. Sólo cuando no hay acuerdo entre las partes ni obligaciones legales, la gestión que hace el administrador de asuntos ajenos es gestión sin causa.