Red de Respuestas Legales - Asesoría legal - La mayor sabiduría para los adultos: conócete a ti mismo con claridad.

La mayor sabiduría para los adultos: conócete a ti mismo con claridad.

#1

Reconoce tu posición

He oído este dicho: “La mayoría de las desgracias en la vida se deben a estar en una posición incorrecta.”

Cosas pierden su valor si se colocan en el lugar equivocado; si las personas se encuentran en el lugar equivocado, es fácil perderse y sentir que son dignos de la gloria y la riqueza que tienen delante.

¿Cuántas personas no se vuelven ni humildes ni arrogantes ni ciegamente confiadas tan pronto como obtienen poder? De hecho, confunden la plataforma con habilidades.

Las personas inteligentes deben saber que lo que poseen y lo que les aporta su puesto son en realidad dos cosas diferentes. La posesión más adecuada y estable en la vida es estar siempre en una posición que coincida con tus propias capacidades.

Warren Buffett dijo una vez: “Sólo cuando baje la marea, sabrás quién ha estado nadando desnudo”.

Cuánta habilidad y talento tiene una persona, algún día La verdad saldrá.

Solo reconociendo la propia posición podrás alejarte de la arrogancia y reducir los errores. Concéntrese en su posición actual, continúe mejorando y progrese de manera constante.

#2

Reconoce tu propio valor

Muchas veces la dirección es incorrecta y por mucho que lo intentes, será inútil. Reconocer tu propio valor y elegir la dirección correcta es la mitad de la batalla.

Los logros literarios de Mark Twain son obvios para todos, pero poco se sabe sobre su experiencia empresarial.

La primera vez que invertí en un proyecto de máquina de escribir, invertí mucho dinero y lo perdí todo.

La segunda vez me convertí en emisor, pero como no entendía las finanzas y la gestión, la empresa quebró y quedó muy endeudada.

Desesperado, solo pudo dejar su negocio y concentrarse en escribir y hablar a tiempo completo.

Inesperadamente, no solo saldó sus deudas, sino que también acumuló cierta cantidad de riqueza apoyándose en un negocio que no le gustaba al principio.

Cuando te lamentas de tu mediocridad, tal vez simplemente no hayas encontrado un campo de batalla que se adapte a ti. No hay mediocridad inherente en este mundo, sólo gente fuera de lugar.

Una tortuga no puede correr más rápido que una liebre en el suelo, pero en el agua, una tortuga siempre puede nadar más rápido que una liebre. ¡Esto nos dice que no nos extravíemos!

Reconoce tu propio valor y encuentra tu posición correctamente, y podrás tener éxito incluso si no estás calificado.

#3

Reconoce tus habilidades

Existe un "efecto Dak" psicológico.

Algunas personas tienden a sobreestimar sus capacidades. Cuanto peor es la capacidad de una persona, más grave es esta sobreestimación.

En otras palabras, cuanto más estúpidas son las personas, más les gusta ser moralistas.

Regístrate y haz cosas más allá de tus capacidades. Al final sufrirás.

Un verdadero sabio puede reconocer los límites de sus propias capacidades y saber detenerse en el tiempo.

Una vez, un alpinista se preparó durante varios años para conquistar el Monte Everest. Sin embargo, cuando ascendió a una altitud de 7.000 metros, decidió retirarse por falta de fuerza física.

Mucha gente quedó desconcertada. Él respondió: "Los 7.000 metros ya son un milagro para mí".

Aunque estaba a sólo un paso de llegar a la cima, él sabía que lo lograría. El límite extremo, lucirse sólo traerá peligro a la propia vida.

Como dice el refrán: "Si no tienes una cabeza tan grande, no uses un sombrero tan grande".

Lo que más teme una persona no es que es incapaz, pero que sobreestima su capacidad.

Hazlo lo mejor que puedas, pero también dentro de tus posibilidades. Si reconoces tus habilidades podrás saberlo todo y tomarte tu tiempo.

#4

Reconoce tu propio peso en el corazón de los demás

Escuché un dicho que es muy cierto y cruel:

Una de las señales de madurez es comprender que el 99% de lo que te sucede cada día no tiene significado para los demás.

Russell dijo una vez:

Después de todo, todo el mundo es un individuo independiente.

En cualquier relación o puesto, nunca te tomes demasiado en serio. No hay nadie en este mundo sin quien no podamos vivir. A veces, cuando te das la vuelta, te conviertes en un extraño.

En lugar de preocuparte por con quién tienes una relación, aprende a vivir tu propia vida.

La mejor mentalidad para que las personas se lleven bien con los demás es: cercanía, amor y odio a voluntad.

Los antiguos decían: "El talento es una gran sabiduría, la sabiduría es armoniosa y el pensamiento es una gran sabiduría".

En esta vida, sólo reconociéndose a uno mismo se puede avanzar con firmeza y lejos.

Editor de este número | Liu Yilin