Red de Respuestas Legales - Asesoría legal - En el estuche debe haber un borrador, que pueda borrar las palabras equivocadas y ayudarnos a corregir nuestros errores. ¿Quién inventó esta tan buena papelería?

En el estuche debe haber un borrador, que pueda borrar las palabras equivocadas y ayudarnos a corregir nuestros errores. ¿Quién inventó esta tan buena papelería?

El borrador puede borrar la escritura a lápiz. Fue descubierto por primera vez por el científico británico Priest en 1770. Antes de eso, la gente usaba pan para limpiar los lápices. El descubrimiento de Priest causó gran sensación porque supuso una gran comodidad para la gente. Sin embargo, las primeras gomas de borrar se fabricaban con caucho natural. Cuando borré las palabras, no cayó ninguna migaja. Simplemente pega la punta del lápiz al borrador y cuanto más lo frotas, más sucio se vuelve. Más tarde, cuando la gente fabricaba borradores, les añadían azufre, aceite y otras sustancias, lo que hacía que los borradores fueran fáciles de romper. Las virutas de lápiz borradas dejan migas en el borrador para que éste se mantenga limpio y las hojas no manchen el papel.

En 1770, el científico británico Joseph Priestley dijo: “He visto una sustancia muy adecuada para borrar la escritura con lápiz”.

Borrador

En aquella época, la goma Las partículas cortadas en pequeños cubos se utilizaron en toda Europa para borrar la escritura. Este tipo de caucho se llamó caucho.

Otro ingeniero británico, Edward Naime, es considerado el inventor de la goma de borrar en 1770. Antes de eso, la gente usaba esponjas para borrar la escritura. Naime dijo que una vez accidentalmente tomó un trozo de borrador y descubrió que funcionaba muy bien, así que comenzó a producir y vender borradores.

El borrador original era un inconveniente porque el borrador sin procesar era propenso a pudrirse. No fue hasta 1839, cuando el inventor Charles Goodyear descubrió que la vulcanización podía mejorar la calidad del caucho, que los borradores se volvieron confiables.

En 1858, un hombre de Filadelfia, EE. UU., obtuvo una patente para incorporar una goma de borrar en la punta de un lápiz. Sin embargo, la patente de este lápiz con goma de borrar fue posteriormente cancelada porque se consideró que no lo era. "sólo una combinación de dos lápices." incrustado en algo existente en lugar de un producto nuevo."