Disposiciones legales sobre tutela en el Código Civil
Proteger la salud y la seguridad de la vida del pupilo;
Administrar y proteger la propiedad del pupilo;
Servir en actividades civiles Tutor;
Educar y restringir al pupilo;
Representar al pupilo en litigios, etc.
En el Código Civil existen disposiciones claras sobre el establecimiento, cambio y revocación de la tutela. Por ejemplo, los padres de un menor son los tutores del menor; para un adulto que no tiene capacidad para la conducta civil o tiene capacidad limitada para la conducta civil, actúan como tutores su cónyuge, sus padres, sus hijos adultos u otros parientes cercanos. Si un tutor no está calificado o no cumple con sus deberes de tutela, el tribunal popular puede, basándose en la solicitud de la persona u organización pertinente, revocar su calificación de tutela, disponer las medidas de tutela temporales necesarias y designar un nuevo tutor de conformidad con el principio que sea más beneficioso para el pupilo.
Las disposiciones legales sobre tutela en el Código Civil tienen como objetivo proteger los derechos e intereses de los menores y de las personas sin capacidad para conductas civiles. Este reglamento establece los derechos y deberes del tutor y cómo se puede establecer, modificar y revocar una tutela. Estas regulaciones ayudan a proteger la salud física y mental y la seguridad de la propiedad del pupilo, y también protegen los derechos e intereses legales del tutor.
Comprender las disposiciones legales:
En primer lugar, el tutor y el tutelado deben comprender las disposiciones legales sobre tutela del Código Civil y aclarar los derechos y obligaciones de ambas partes.
Configurar un tutor adecuado: al establecer un tutor, se debe seleccionar un tutor adecuado en función de la situación real y las necesidades del pupilo. Por ejemplo, el padre de un menor es el tutor preferido. Si los padres no pueden o no son aptos para actuar como tutores, otros parientes cercanos u organizaciones pueden actuar como tutores.
Realizar deberes de tutela: Los tutores deben desempeñar concienzudamente sus deberes y proteger la salud física y mental y la seguridad de la propiedad del pupilo. Al mismo tiempo, también debemos respetar los deseos y derechos del pupilo y evitar una interferencia excesiva en su vida y en su toma de decisiones.
Solicitud oportuna para cambiar o cancelar la tutela: si se descubre que el tutor no cumple con sus deberes o infringe los derechos del tutelado, puede solicitar al Tribunal Popular que cambie o cancele la tutela. tutela en el momento oportuno. Durante este proceso, se deben proporcionar pruebas y materiales suficientes para permitir que el tribunal tome una decisión justa.
Busque asistencia legal: si encuentra problemas o disputas relacionadas con la custodia, puede buscar asistencia legal profesional, como consultar a un abogado o asesor legal, para proteger mejor sus derechos e intereses.
En definitiva, las disposiciones legales sobre tutela del Código Civil son una garantía importante para la protección de los derechos e intereses de los menores y de las personas sin capacidad civil. Al comprender las disposiciones legales, designar un tutor adecuado, desempeñar funciones de tutela, solicitar cambios o revocación de la tutela de manera oportuna y buscar asistencia jurídica, se pueden proteger eficazmente los derechos e intereses del pupilo y se pueden proteger los derechos y derechos legítimos. También pueden protegerse los intereses del tutor.
Base jurídica:
Código Civil de la República Popular China
Artículo 35
El tutor actuará conforme a la ley que sea más beneficioso para el tutelado en principio. El tutor no podrá disponer de los bienes del pupilo excepto para salvaguardar los intereses del pupilo. Cuando los tutores de menores desempeñen sus deberes de tutela y tomen decisiones que involucren los intereses del tutelado, respetarán los verdaderos deseos del tutelado en función de su edad y estado mental. Al desempeñar sus funciones de tutela, los tutores adultos deben respetar al máximo los verdaderos deseos del pupilo y garantizar y ayudar al pupilo a llevar a cabo actos jurídicos civiles acordes con su salud intelectual y mental. Los tutores no interferirán con los asuntos que el pupilo sea capaz de manejar de forma independiente.