¿Es la ley el fundamento de la moralidad?
La ley y la moral son las dos normas que regulan el comportamiento de las personas en la vida real y tienen diferentes efectos en la vida de las personas. La ley utiliza la coerción para mantener la estabilidad social y la moralidad utiliza la crítica para mantener la justicia en los corazones de las personas.
La justicia de cada persona es diferente y la ley no puede tener en cuenta los valores de cada uno. Cuando era niño, me peleaba con niños. Si pierdo, mis padres me golpearán. Si gano, mis padres me derrotarán. Cuando sea mayor, tengo conflictos con los demás. Si pierdes, ve al hospital; si ganas, ve a la comisaría.
Creo que este ejemplo puede ilustrar vívidamente el estatus del derecho en la vida. Si crees que otros han hecho algo mal, utiliza tu propia manera de defender tu justicia interior. Pero si tu camino infringe la ley, también serás castigado por la ley.
El entorno de crecimiento y el entorno de vida de cada uno son completamente diferentes, y sus puntos de vista sobre la justicia también son muy diferentes. Es imposible que la ley tenga en cuenta los valores de todos, sino utilizar una regulación unificada para obligar a todos.
El propósito de la ley es mantener la estabilidad social y, a menudo, no hay bien ni mal. Cuando mi hermano abrió una tienda hace unos años, impulsivamente se peleó con su vecino porque era demasiado cruel. Desde la perspectiva de nuestra familia, siento que mi hermano no hizo nada malo. No causamos problemas, pero tampoco podemos ser intimidados. Pero desde una perspectiva legal, hizo algo mal y su detención cumplió con la ley.
La existencia del derecho en sí es la piedra angular para mantener la estabilidad de toda la sociedad. Podemos limitarnos con conceptos morales, pero la moralidad no es obligatoria y la ley exige que todos tengan estándares unificados. Las violaciones de la ley serán castigadas.
Muchas veces, lo que pensamos que está bien o mal no tiene significado a nivel legal. Pero incluso si infringe la ley, todavía está protegido por la ley.
Siempre estamos acostumbrados a enfrentar el mundo con nuestras propias opiniones, pero en realidad muchas opiniones personales no favorecen el mantenimiento de la estabilidad social. En realidad, el papel de la ley es disipar los pensamientos internos de las personas que ponen en peligro la estabilidad social.
Sólo cuando todos cumplan la ley podrá la sociedad avanzar en un estado estable.