Ambos métodos son muy útiles para acelerar la germinación de las semillas de pimiento.
Después de remojar las semillas del pimiento, lávalas repetidamente con agua para quitarles el picante. Luego envuélvelo en un paño y ponlo en la olla. Cúbrelo con una gasa húmeda e incuba a 28-30 grados centígrados para acelerar la germinación. Durante este período, presta atención a lavarlo dos veces al día con agua tibia a unos 30 grados centígrados, y brotará en unos 4-5 días.
2. Método de germinación a temperatura variable.
La temperatura tiene una gran influencia en la germinación de las semillas de pimiento, siendo la temperatura más adecuada entre 25 y 35 grados centígrados. Sin embargo, dado que la germinación a temperatura constante hará que las semillas germinen de forma irregular, en la mayoría de los casos se utiliza la germinación alterna a temperatura alta y baja.
Envuelve las semillas con un paño húmedo y controla la temperatura a 28-30 grados centígrados durante 16-18 horas y a 16-20 grados centígrados durante 6-8 horas todos los días. Para que las semillas se calienten de manera uniforme y siempre en un ambiente de humedad adecuado, es necesario voltearlas y fregarlas aproximadamente dos veces al día. Cuando la mayoría de las semillas germinan, se pueden colocar en un ambiente de 10 grados centígrados para hacer ejercicio a baja temperatura.