¿Es necesario realizar detenciones penales por operaciones ilegales?
En primer lugar, debe quedar claro que estar detenido penalmente no significa necesariamente ir a la cárcel. La detención penal es una medida coercitiva, no una forma de sentencia. En la práctica judicial, los detenidos por delitos penales no serán condenados ni encarcelados si se demuestra que no han cometido un delito durante investigaciones y juicios posteriores. Por lo tanto, ser detenido penalmente no necesariamente significa ir a la cárcel. Depende de las circunstancias y las pruebas del caso.
En segundo lugar, es necesario analizar la situación de la detención penal por operaciones ilegales en función de las circunstancias específicas. En algunas infracciones menores, como violar las normas de tránsito, ocupar terrenos ilegalmente, dañar instalaciones públicas, etc., incluso si está detenido penalmente, no necesariamente será sentenciado o encarcelado. Estas acciones se consideran legalmente delitos menores o negligencia criminal y se tratan con relativa ligereza.
Sin embargo, en algunas operaciones ilegales graves, como corrupción y soborno, infracción de derechos de propiedad intelectual, puesta en peligro de la seguridad nacional, etc. , la responsabilidad penal puede ser grave después de ser detenido, y estos actos son considerados delitos graves o delitos por ley. En estos casos, si lo declaran culpable, es más probable que lo condenen o lo encarcelen.
Además, cabe señalar que la duración de la detención penal es limitada. Según la Ley de Procedimiento Penal, el período máximo de detención penal es de 37 días. Si es necesario ampliarla, debe ser aprobada por el tribunal. Si los órganos de seguridad pública no pueden determinar si son culpables dentro de este plazo, los detenidos deberán ser liberados.