"Guarding the Liberated West" no tiene estrellas ni guión. ¿Por qué todavía hay un brote global?
Primero, porque los casos reales son apasionantes.
Aunque las tramas de algunas series de televisión o novelas son particularmente impactantes y divertidas, todos estos contenidos provienen de la vida real. Algunas tramas de la vida son más emocionantes que las de las novelas, y esos casos asombrosos existen. El mundo está lleno de maravillas que hacen sentir increíble al espectador, pero estos casos también son muy fascinantes. En este documental no sólo algunos adultos cometen delitos, sino que también algunos menores tienen diversos problemas. Algunos de ellos se encuentran en la época rebelde de la juventud y tienen muchos conflictos con sus familias. Algunas personas carecen del cuidado de sus padres, por lo que quieren utilizar algunas medidas extremas para solucionar el problema. Pero a los ojos de la policía, todos son niños, por lo que, bajo su cuidadosa guía, algunos se han reconciliado con sus familias y otros han reavivado sus esperanzas en la vida.
En segundo lugar, los verdaderos sentimientos de la policía conmovieron a todos.
Todos los policías que aparecen en este documental son muy amables. Trabajan diligentemente en sus puestos, pero también escalan montañas con sus compañeros después del trabajo. Piensan que esto es trabajo en equipo y una buena manera de relajarse, pero los internautas piensan que su método de trabajo en equipo es muy especial. Algunos agentes de policía también tienen su propio sentido del humor y, a menudo, hacen bromas cuando interactúan con la gente corriente. Sin embargo, también han acortado la distancia con la gente y han sido elogiados por la gente.
Tres. Conclusión
A los ojos de todos, la policía es gente común y corriente que lleva uniformes de policía. Después de quitarse la ropa, son también los padres del niño y el hijo o hija de los padres. Esta película no sólo populariza una gran cantidad de conocimientos jurídicos para todos, sino que también les permite a todos experimentar el ajetreo diario del trabajo policial.