Dieta para la cirrosis hepática
Los pacientes con cirrosis hepática suelen tener pérdida de apetito y se les debe dar alimentos que sean fáciles de digerir y absorber, comidas pequeñas y frecuentes, alimentos blandos no irritantes y alimentos finamente elaborados. Evite los alimentos duros y ásperos, como los fritos y las frutas duras. La función inmune del cuerpo se puede seleccionar a partir de diversas fuentes de alimentos con proteínas. Incluyendo productos de soja, pescado, carnes magras y huevos.
La dieta de los pacientes con cirrosis hepática debe basarse en el principio de comidas pequeñas y frecuentes. Utilice métodos de cocción diversificados para tratar la cirrosis hepática. Evite los alimentos picantes, principalmente los alimentos blandos y semilíquidos que son blandos, fáciles de digerir, producen menos gases y evite todos los alimentos crudos, duros, crujientes y gruesos. Si tiene hemorragia gastrointestinal superior, debe ayunar.