El primer país del mundo en establecer un sistema de patentes.
El Reino Unido es el primer país del mundo en establecer un sistema de patentes. En 1236, el rey de Inglaterra concedió a los ciudadanos de Burdeos un monopolio de quince años sobre la fabricación de tejidos de colores, lo que se considera el germen del moderno sistema de patentes.
En 1624, el Reino Unido promulgó la "Ley de Monopolio", que fue la primera ley de patentes del mundo de importancia moderna.
El proyecto de ley establece que los inventores pueden disfrutar de derechos exclusivos sobre sus invenciones durante un tiempo limitado, y que una vez que expire la patente, cualquiera puede utilizar libremente la invención.
El establecimiento de este sistema ha sentado las bases para proteger las invenciones y promover el desarrollo económico.