¿Por qué la cultura basura de la mesa del vino no está completamente prohibida, pero algunas personas la hacen incomprensible?
Este fenómeno es una tragedia para toda la sociedad, pero hace que la gente se sienta muy impotente, porque todos deben cumplir con esta cultura, de lo contrario su desarrollo se verá muy restringido. Hoy en día, es más fácil hablar de trabajo u otras cosas en la mesa del vino. En la mesa del vino se transmiten poco a poco varias culturas. Por ejemplo, existen requisitos estrictos sobre el orden de los platos, el orden de los brindis, la hora de beber y el número de personas que beben. Se puede decir que hay demasiada cultura en la mesa del vino como para prohibirla directamente de una vez.
Además, muchas personas sienten que si no beben cuando hablan de las cosas, el ambiente no es suficiente. Algunas personas piensan que es una falta de respeto hacia los demás pedir ayuda a otros si no quieren brindar. Precisamente porque el estatus de cada persona es desigual a la hora de beber, ha surgido una cultura cada vez más seria en la mesa de beber. Las personas en posiciones inferiores, naturalmente, seguirán brindando por los que están por encima de ellos, y también mostrarán una actitud muy humilde al brindar.
Esta es la forma fija de pensar de muchas personas en el ámbito empresarial, y también es la forma de complacer a los débiles. El objetivo de cada uno es completar sus propias ideas y objetivos, por lo que es normal tener una actitud más baja. Esto no es como charlar entre buenos amigos para solucionar problemas, sino buscar ayuda de un experto, por lo que cada uno solo puede bajar el perfil para adaptarse a esta mala cultura de la mesa del vino. Cada vez más personas optan por hacer concesiones, por lo que esta cultura se está extendiendo cada vez más.