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¿Cuán influyente es la economía de China?

Al elogiar la contribución de China a la economía mundial, Fang Public Opinion citó dos ejemplos: el fuerte crecimiento económico de China ha impulsado el aumento de los precios en los mercados mundiales de materias primas y energía. El aumento de los precios ha traído buenas noticias a los países exportadores de materias primas y energía, pero al mismo tiempo, debido a que China exporta una gran cantidad de productos baratos, también ha frenado la presión inflacionaria en otros países causada por el aumento de los precios de las materias primas y la energía. La revista británica "Economist" afirma que desde el año 2000 el precio del mercado mundial del petróleo se ha triplicado y su tasa de crecimiento es comparable a las dos crisis del petróleo de los años 1970. Sin embargo, este aumento de los precios del petróleo no provocó el habitual aumento de la inflación y la recesión económica. Cree que esto se debe principalmente a China.

The Economist elogia la contribución de la economía china a la economía mundial, pero deberíamos ver los enormes riesgos que enfrenta la economía china y las crisis ocultas dentro de ella.

La economía de China depende en gran medida de países extranjeros, lo que significa que el comercio de importación y exportación representa una gran proporción del PIB. En términos de tipos de cambio, el índice de dependencia extranjera en el primer trimestre de 2005 alcanzó 48, el valor más alto desde 1990. El alto grado de dependencia externa muestra que la economía de China es muy abierta, y en gran parte esto se debe a que China necesita importar una gran cantidad de materias primas y energía del exterior. En 2003, el petróleo crudo, el mineral de hierro, la alúmina y otros productos de China importados del extranjero representaron el 35 por ciento, el 36 por ciento y el 47 por ciento del consumo total, respectivamente, y el níquel y el caucho natural representaron más del 55 por ciento. Según estimaciones de los expertos, la dependencia petrolera de China del extranjero alcanzará el 60% en 2020.

A medida que los precios en los mercados mundiales de materias primas y energía sigan aumentando, nuestro actual modelo de crecimiento económico se enfrentará a una enorme crisis. Nuestro mercado de exportación es un mercado altamente competitivo. Carecemos de poder de fijación de precios, por lo que es difícil que el precio de los productos de exportación aumente con el aumento de los precios de las materias primas y la energía. Necesitamos divisas para importar materias primas y energía, y carecemos de capacidad para cotizar precios, lo que nos obliga a seguir exportando productos para mantener el equilibrio. Cuando el gobierno estadounidense fomenta la devaluación del dólar estadounidense para reducir su deuda, tenemos razones para creer que China está exportando más productos a cambio de un poder adquisitivo limitado, pero su capacidad para comprar materias primas, especialmente energía, no puede aumentar en consecuencia. Si todavía no cambiamos el modelo de desarrollo "extensivo", enfrentaremos el dilema de producir más y obtener menos ingresos reales. Desde esta perspectiva, el llamado del gobierno central a construir una sociedad orientada a la conservación no es sólo un eslogan, sino que en realidad está relacionado con la sostenibilidad futura del desarrollo económico de China y es una cuestión de vida o muerte.

Además, la economía de China no puede contentarse con ser la “fábrica del mundo”. Si no cultivamos nuestras propias capacidades creativas y de diseño, el crecimiento económico futuro se reducirá considerablemente. Por supuesto, a lo largo de los años de reforma y apertura, las capacidades de fabricación industrial de China han logrado grandes avances y la proporción de exportaciones de productos manufacturados industriales ha seguido creciendo. Pero al mismo tiempo, las importaciones chinas de productos manufacturados industriales del extranjero también están creciendo, principalmente porque necesitamos introducir equipos avanzados del extranjero y acelerar la mejora de la tecnología y los equipos industriales. Esta situación muestra que la fortaleza industrial general de China todavía no es lo suficientemente fuerte y que la tecnología y los equipos avanzados todavía dependen de las importaciones. A medida que nuestras capacidades de fabricación se acerquen cada vez más a las de los países industrializados, sus empresas considerarán cada vez más a las chinas como rivales, será cada vez más difícil transferir tecnología a las empresas chinas y las condiciones serán cada vez más exigentes. El continuo énfasis en la protección de los derechos de propiedad intelectual por parte de Estados Unidos y Europa en las negociaciones comerciales con China refleja sus preocupaciones. Al mismo tiempo, el proteccionismo comercial en Estados Unidos, Japón y Europa está aumentando, y las exportaciones de China a ellos pueden verse restringidas bajo diversas excusas en el futuro.

Aunque la situación que enfrenta es muy grave, la economía china todavía tiene algunas ventajas inherentes. Por ejemplo, el potencial de mercado de China se revela cada vez más. China ya puede aprovechar su dominio en materia de consumo y utilizar su propio mercado para proporcionar algunas condiciones. Las empresas extranjeras deben pagar un precio determinado por la transferencia de tecnología si quieren ocupar el mercado chino. A medida que los precios de la energía y las materias primas continúan aumentando, China debe aumentar la transformación tecnológica, mejorar la tasa de utilización de la energía y las materias primas y promover el uso múltiple y el reciclaje de las materias primas. El mercado de China es enorme. Si se utiliza una gran cantidad de nuevas tecnologías, el costo de su uso puede reducirse.

Si la situación nos obliga a avanzar tecnológicamente, el desarrollo económico de China tendrá una base más sólida en el futuro.

Por supuesto, China todavía enfrenta muchos problemas de desarrollo desequilibrado, polarización social grave, el sistema bancario y financiero no es muy sólido, el medio ambiente puede enfrentar crisis, etc. Pero como dijo Izralevich, subdirector del periódico francés Les Echos, la situación actual de China se parece un poco a la de Estados Unidos en el siglo XIX: el consumo masivo está tomando forma, la urbanización se acelera y los problemas sociales proliferan. Estados Unidos ha experimentado muchas crisis en el proceso de industrialización y China inevitablemente enfrentará riesgos, pero la tendencia general del desarrollo de China no cambiará.