Red de Respuestas Legales - Derecho de marcas - No sé si el brillo de labios Armani que acabo de comprar es real o falso. Cuando lo abrí por primera vez, se puso rojo. No sé si esto es normal, está seco y pegajoso.

No sé si el brillo de labios Armani que acabo de comprar es real o falso. Cuando lo abrí por primera vez, se puso rojo. No sé si esto es normal, está seco y pegajoso.

Armani Velvet Matte Lipstick es un lápiz labial líquido que fue un éxito instantáneo cuando se lanzó. Tiene una textura mate, es relativamente ligero, muy cómodo, no pegajoso y no provoca descamación en la boca fácilmente. ¡Puede durar aproximadamente 8 horas y no se quita fácilmente incluso si comes o bebes agua! El efecto de la pintura es aterciopelado, semimate y tiene un fuerte poder cubriente. No importa cuál sea el color de labios original, ¡el color de la pasta se puede borrar!

Las grandes marcas siempre tienen falsificaciones. ¿Cómo saber la autenticidad del glaseado de labios Armani? Echemos un vistazo a la comparación entre el brillo de labios Armani real y el falso compilada por el editor.

Comparación del esmalte de labios Armani real y falso;

Cabezal del cepillo: el cabezal del cepillo del esmalte de labios Armani es suave y la parte superior del cabezal del cepillo está ligeramente curvada. El brillo de labios falso de Armani parece un poco nítido.

Fuente del embalaje exterior: las fechas de producción y uso están marcadas en la parte inferior del esmalte de labios Armani. La fuente es muy clara y se verá diferente bajo la luz. La fuente del brillo labial falso de Armani está impresa de manera tosca y no se ve clara.

Marca registrada: Después de abrir el esmalte de labios Armani, puede ver una marca en el medio del pincel, con el borde hacia la barra central de la marca. Los productos de imitación de Armani no son tan buenos en mano de obra.

Pasta: La pasta del esmalte de labios Armani es relativamente espesa y no se pega al cabezal del cepillo. El brillo de labios falso de Armani es relativamente fino y tiende a adherirse al cabezal del cepillo.