¿Por qué los sindicatos femeninos rurales se convirtieron en programadores en Nueva York?
Una niña de la zona rural de Hunan abandonó la escuela a la edad de 12 años, estudió peluquería y trabajó en el campo. Más tarde, convenció a sus padres para que la dejaran terminar la escuela secundaria. Reprobó el examen de ingreso a la universidad a la edad de 19 años y se convirtió en trabajadora en la línea de montaje de Shenzhen, trabajando quince o seis horas al día con un salario mensual de 2.300 yuanes. Con su magro salario, ahorró la matrícula, tomó clases de programación y finalmente encontró un trabajo de oficina. Luego obtuvo una licenciatura en la Universidad de Shenzhen, trabajó duro en inglés y pasó nueve meses ahorrando 6,5438+2 millones de yuanes para estudiar en los Estados Unidos. Sun Ling estudió en una escuela normal, pero todavía tenía fuertes habilidades profesionales y más tarde se sintió atraída por las empresas de tecnología estadounidenses. Después de graduarse, Sun Ling se convirtió en un ingeniero de software bien remunerado con un salario anual de 800.000 yuanes. Esto hizo que la gente de su ciudad natal se despertara y se diera cuenta. Ella no tuvo tanta suerte como los demás y tenía una situación familiar superior, pero él estuvo diez años acumulando logros poco a poco.
Sun Ling cayó en una situación desesperada. En poco más de un mes, mi padre se fue y yo perdí mi trabajo en Estados Unidos. No sabe lo que quiere ni lo que puede hacer. Al destino le gusta gastarle bromas a la gente. Las personas con más mal karma trabajan más duro, pero se burlan de ellos de esta manera. Sun Ling publicó su experiencia en LinkedIn y buscó oportunidades laborales. Mucha gente la ayudó a reenviarlo a más personas, mucha gente interactuó con ella y familiares y amigos también le dieron palabras de aliento. Estos estímulos también animaron a Sun Ling. No hace mucho, un ingeniero canadiense le dejó un mensaje a Sun Ling, revelando que había experimentado problemas muy graves con la visa, pero que las oportunidades laborales en los Estados Unidos valían la pena. Sun Ling todavía está alegre y expresó los sentimientos de muchas personas al registrarse en WeChat. Sea amable porque probablemente todos estén librando una batalla cuesta arriba. Quienes trabajan duro conseguirán lo que quieren.