Red de Respuestas Legales - Derecho de marcas - Acerca de la presión del turbocompresor

Acerca de la presión del turbocompresor

La turboalimentación no funciona en todas las condiciones de funcionamiento. Esto se debe principalmente a que el efecto del turbocompresor en el motor no es obvio en el rango de bajas velocidades, pero aumenta la contrapresión del escape y el trabajo requerido para el escape.

Una vez que la velocidad del motor es demasiado alta y la presión de sobrealimentación es demasiado alta, la carga térmica del motor será demasiado alta y el turbocompresor acelerará demasiado. Por lo tanto, es necesario ajustar la presión de sobrealimentación del motor. Ajustar el turbocompresor puede mejorar la combinación entre el motor y el turbocompresor, mejorando las características de par.

Historia del desarrollo:

A finales del siglo XIX, con el nacimiento de la maquinaria de impulsor, la gente se dio cuenta de que era diferente de los motores de combustión interna de pistón. 1905 165438+octubre El ingeniero suizo Alfred Bucci propuso un plan para combinar un motor de combustión interna de pistón con una máquina impulsora, concretamente un turbocompresor de gases de escape. En 1925, Bush obtuvo una patente para la "sobrealimentación por impulsos", que todavía se estudia como un medio importante para mejorar el rendimiento de los motores de combustión interna en el siglo XX.

En la década de 1920, una empresa suiza diseñó y fabricó por primera vez el primer turbocompresor de gases de escape compatible con un motor diésel de cuatro tiempos. Este sobrealimentador tiene una relación de impulso de 1,3 y utiliza un compresor centrífugo de dos etapas, lo que supone otro hito en la historia del desarrollo de motores diésel.

En 1926 se fundó en Suiza la primera empresa de supercargadores del mundo. Ese mismo año, Alemania produjo el primer lote de motores diésel turboalimentados, que aumentaron la potencia del motor diésel de 423 kilovatios a 551 kilovatios, un aumento del 30%. Sin embargo, su relación de impulso es inferior a 15 y su vida útil es relativamente corta.

En la década de 1940, la tecnología de turbocompresores maduró gradualmente, como las series BF y E con relación de baja presión producidas por una empresa estadounidense, las series L y H producidas en 1949, la serie C producida en la década de 1960, y la serie VTR desarrollada por la empresa, las series MS y HP desarrolladas por una empresa británica, etc.

El sobrealimentador representativo de esta época fue el turbocompresor HS-400 expuesto por una empresa francesa en el Salón de Hannover en 1962. El turbocompresor tiene una relación de impulso de 25, entrada de aire de la turbina (temperatura máxima 600, velocidad máxima 20.000 r/min, peso del sobrealimentador 145 kg. Se utiliza para motores diésel de 294,2 ~ 441,3 kW.