Cómo definir "arma" en el derecho penal
Que se trate de un arma homicida según el derecho penal depende de si hace que la gente corriente sienta directamente un peligro para sus vidas o sus cuerpos desde la perspectiva del estatus social. En este sentido, se puede decir que los explosivos y las sustancias tóxicas son armas homicidas, pero no así las cuerdas, toallas de tela, cinturones, etc. No es un arma homicida.
Ya en junio 5438+065438+17 de octubre de 2000, el Tribunal Popular Supremo promulgó la "Interpretación sobre varias cuestiones relativas a la aplicación específica de las leyes en el juicio de casos de robo", cuyo artículo 6 también estipula que "Robo con arma". "Robo a mano armada" se refiere al comportamiento del autor portando armas de fuego, explosivos, cuchillos controlados y otros equipos que el estado prohíbe portar a las personas, o portando otros equipos con el fin de cometer un delito.
Se puede entender que el Tribunal Popular Supremo divide las "armas homicidas" en dos tipos, uno es la naturaleza del arma homicida (es decir, prohibida internacionalmente) y el otro son las armas funcionales (letales). Las armas deben entenderse como herramientas utilizadas para matar personas. Cualquier herramienta que no se utilice con el fin de matar no es un arma homicida.
Por ejemplo, las armas de fuego son armas homicidas cuando se usan en delitos y son armas efectivas para la autodefensa o la represión del crimen en manos de la policía. Los cuchillos de cocina se encuentran básicamente en todos los hogares y no están prohibidos; por el Estado, pero en manos de criminales. Pero se convirtió en un "arma asesina".
En cuanto a cómo juzgar si se trata de un arma homicida, requiere un análisis específico de casos concretos y no se puede generalizar.
Datos ampliados:
En el manejo de casos, las armas homicidas deben definirse estrictamente como las dos situaciones siguientes:
1. cuchillos controlados Equipo cuyo transporte está prohibido por personas en otros países.
2. Otras herramientas que se portan en la comisión de delitos, como ladrillos, cuchillos de cocina, etc. Estos instrumentos no están controlados por el Estado. Para determinar si se trata de armas homicidas se debe combinar con el propósito subjetivo del perpetrador.
Si el autor la porta con el fin de cometer un delito, debe considerarse un arma homicida. Porque, en este caso, si bien el dispositivo en sí no refleja ilegalidad, la intención refleja la naturaleza de su arma.
Si el perpetrador no porta otras herramientas con el fin de cometer un delito, ni las muestra ni las utiliza, no debe considerarse un arma homicida. Si un carpintero intenta robar temporalmente a un transeúnte en su camino a casa después del trabajo, y el cepillo y el cincel que lleva consigo no están destinados a cometer un delito, ni están exhibidos o utilizados, no debe considerarse robo con un arma.
Enciclopedia Baidu-Derecho Penal