¿Cómo identificar si una firma es mía?
Una carta de compromiso es en realidad una especie de contrato. Una carta de compromiso firmada por un individuo es, por supuesto, jurídicamente vinculante. Sin embargo, un compromiso válido debe cumplir al mismo tiempo las tres condiciones siguientes:
1. Ser reflejo de la verdadera voluntad de las partes. El contenido de la carta compromiso será la expresión de la verdadera intención de las partes y no podrá ser coaccionada, amenazada, inducida o engañada.
2. No existe violación de las leyes y regulaciones pertinentes. El contenido de la carta de compromiso debe cumplir con las disposiciones de la ley y no debe violar las disposiciones prohibitivas de las leyes o reglamentos administrativos, de lo contrario la carta de compromiso puede resultar inválida.
3. No atente contra los intereses de otros. El promitente sólo puede disponer de las cosas de las que tiene derecho a disponer y no puede infringir los intereses legítimos de otros.
Base jurídica: Código Civil;
Artículo 146: Son nulos los actos jurídicos civiles realizados por el actor y la contraparte con falsa intención.
Artículo 153 Son nulos los actos jurídicos civiles que violen las disposiciones imperativas de las leyes y reglamentos administrativos. Sin embargo, las disposiciones imperativas no invalidan los actos jurídicos civiles excepto aquellos. Son nulas las acciones judiciales civiles que atenten contra el orden público y las buenas costumbres.
Artículo 154: Son nulos los actos jurídicos civiles en los que el actor se confabula maliciosamente con la contraparte para dañar derechos e intereses legítimos de otros.
Artículo 490 del Código Civil
Si las partes celebran un contrato en forma de contrato, el contrato quedará establecido cuando todas las partes firmen, sellen o tomen las huellas dactilares. Antes de firmar, sellar o tomar huellas dactilares, una de las partes ha cumplido con sus obligaciones principales, y el contrato queda establecido cuando la otra parte lo acepta. Los contratos se celebrarán por escrito según lo estipulado por las leyes, los reglamentos administrativos o lo acordado por las partes. Si las partes no lo hacen por escrito, pero una parte ha cumplido su obligación principal y la otra la ha aceptado, se forma un contrato.