Actualmente, los delitos juveniles representan más del 70% de todos los delitos en China. ¿Cómo afrontar la delincuencia juvenil?
1. Muchos menores se dejan influenciar por el entorno social y creen ciegamente que han elegido cometer delitos siendo menores. Este enfoque conduce a la tragedia. El propósito fundamental de la ley es proteger a los menores de la comisión de delitos, pero encontraremos que algunos menores optan por cometer delitos intencionalmente debido a algunas malas tendencias sociales y porque creen que tienen una ventaja de edad. Este enfoque viola la intención original de la ley, por lo que los menores que cometan delitos intencionalmente deben ser severamente castigados por la ley.
2. Por un lado, los menores infractores deben ser guiados por tutores, y los niños deben ser severamente castigados por la ley y ser verdaderamente conscientes de sus errores. De hecho, debo decir que considerando la edad de los menores, es posible que efectivamente carezcan de la educación adecuada, por lo que es necesario orientar a sus tutores para que cumplan con sus debidas responsabilidades. Por otro lado, para los menores, es necesario aumentar la orientación para permitirles efectivamente aumentar el costo del delito, hacer que los menores se den cuenta de sus errores y evitar tragedias mayores.
3. Los problemas específicos deben analizarse concretamente. Los delitos juveniles deben abordarse desde la fuente, para que los menores puedan darse cuenta de los errores de su comportamiento, para que puedan cambiarse fundamentalmente. En realidad no sabía que todos eran menores. Debido a una capacidad cognitiva deficiente, habrá un comportamiento criminal ciego. Precisamente por ello se debe educar a los menores desde la fuente, para que puedan tomar conciencia de la importancia de la ley y de las consecuencias que los errores delictivos pueden acarrear para ellos mismos. En este caso también podemos alejar a los menores de la delincuencia.
De hecho, también es responsabilidad de toda la sociedad mantener a los menores alejados de la delincuencia. Por un lado, debemos ofrecer una orientación correcta para que los menores puedan dejar de delinquir. Por otro lado, es necesario incrementar el coste de los delitos menores y hacer que los menores se den cuenta de sus errores.