¿Es necesario evaluar la calificación crediticia de las empresas constructoras?
Las calificaciones crediticias de las empresas constructoras se dividen en AAA, AA, A, B y c.
AAA: Buen crédito. Significa que la unidad de confianza tiene alta integridad, excelentes indicadores, alta calidad corporativa, gran conciencia de integridad, buenas condiciones operativas, sólidas capacidades de ejecución de contratos y buena reputación social.
Nivel AA: buen crédito. Significa que la unidad de confianza tiene alta integridad, indicadores avanzados, alta calidad corporativa, gran conciencia de integridad, buenas condiciones operativas, sólidas capacidades de ejecución de contratos y buena reputación social.
Calificación A: Buen crédito. Significa que la unidad de confianza tiene alta integridad, indicadores avanzados, alta conciencia de integridad, buenas condiciones operativas, sólidas capacidades de ejecución de contratos y buena calidad corporativa y reputación social.
Nivel B: Crédito medio. Significa que la unidad confiable tiene integridad promedio, indicadores promedio, calidad corporativa promedio, conciencia de integridad promedio, condiciones operativas promedio, capacidades de desempeño contractual promedio y reputación social promedio.
Nivel C: mal crédito. Significa que la unidad confiable tiene poca integridad, indicadores atrasados, baja calidad corporativa, débil conciencia de integridad, malas condiciones operativas, débil capacidad para cumplir contratos y mala reputación social.