Consecuencias legales del matrimonio y las disputas familiares
La violencia doméstica se refiere al comportamiento en el que los perpetradores utilizan golpes, atar, mutilar, restringir y otros medios para causar daño físico y mental a los miembros de la familia. La violencia doméstica persistente y frecuente se llama abuso. El abuso incluye violencia física y sexual, amenazas e intimidación, abuso emocional y privaciones económicas. Causar lesiones leves puede constituir un delito penal y estar sujeto a sanciones penales; si la violencia doméstica conduce al divorcio, las mujeres y los niños pueden recibir una compensación material y mental;
Dos personas que viven juntas no se creen marido y mujer. El matrimonio de hecho y el matrimonio son sólo registros, lo que significa vivir juntos en nombre del marido y la mujer. En muchas zonas rurales sólo existe el matrimonio de hecho, en el que dos personas viven juntas y ejercen diversos derechos y obligaciones de marido y mujer, pero no están registrados. El país ahora no reconoce la legalidad de este matrimonio. La convivencia no está protegida por la ley, mientras no constituya un delito, no está sujeta a la ley y es un acto individual. El matrimonio de hecho no está protegido por la ley.