¿Se puede curar el desequilibrio sensorial de un niño? ¿Cuáles son algunas formas de mejorarlo?
El contenido del entrenamiento sensorial consiste principalmente en una variedad de juegos entretenidos y educativos, que incluyen cruzar el túnel del sol, jugar con cables cilíndricos, sentarse en una pelota de esquina, subirse a una patineta, caminar sobre una balanza en forma de S. haz, etc
A través del entrenamiento de integración sensorial los niños progresarán en los siguientes aspectos: En primer lugar, se mejora su capacidad de aprendizaje y se mejoran los malos hábitos de conducta. En segundo lugar, mejora las habilidades interpersonales y las habilidades lingüísticas. En tercer lugar, se mejora la coordinación corporal. Por último, ayude a los niños a desarrollar la confianza en sí mismos y a desarrollar una personalidad sólida. Ayude a los niños a inhibir y regular la información sensorial, promover la madurez de diversas áreas sensoriales del cuerpo, mejorando así las capacidades de los niños en todos los aspectos.
Datos ampliados:
Los trastornos de integración sensorial generalmente pueden descubrirse mediante la autoobservación y luego diagnosticarse mediante diagnóstico experto. Reflejado principalmente en los siguientes aspectos:
1. Disfunción del equilibrio vestibular: inquietud, fácil caída al caminar, mareos al caminar en círculos, falta de atención, incapacidad para concentrarse en clase, amor por hacer pequeños movimientos y travieso. Obstinado, entusiasmado y activo, propenso a violar las disciplinas del aula, propenso a conflictos con los demás, quisquilloso y difícil de llevarse bien con los demás.
2. Pobre sentido visual: aunque puedo ver dibujos animados y jugar con juguetes eléctricos durante mucho tiempo, no leo con fluidez, a menudo me salto o me salto la lectura, o hay demasiadas palabras. pocas palabras; invierto los radicales al escribir, incluso si no conoces las palabras, las olvidarás después de aprenderlas, no puedes hacer cálculos y, a menudo, copias las preguntas incorrectas y las pierdes.
3. Mala audición: escuchar las palabras de otras personas, olvidarse de cosas y, muchas veces, olvidarse de lo que dijo el profesor y de los deberes.
4. Tacto demasiado sensible o demasiado lento: miedo a entornos desconocidos, chuparse las manos, morderse las uñas, llorar, jugar con los genitales, etc. Está demasiado apegado a sus padres, propenso a la ansiedad por separación, o está demasiado nervioso, le gusta provocar a los demás, tiene un eclipse parcial o come en exceso y tiene mal genio.
5. Demasiado sensible o demasiado insensible al dolor: conductas de riesgo, autolesiones, automutilaciones y falta de aprendizaje de las experiencias y lecciones. O ser inactivo, retraído, insociable, tímido, carente de curiosidad y conducta exploratoria.
6. Trastorno de propiocepción: mal sentido de la dirección, se pierde fácilmente, no puede jugar al escondite, ojos cerrados, propenso a caerse, incapaz de pararse o sentarse, propenso a encorvarse, miopía, demasiado miedo de la oscuridad.
7. Mala coordinación de movimientos: Mala coordinación de movimientos, caerse con facilidad al caminar, no poder levantarse, andar en bicicleta, saltar la cuerda y tirar la pelota como el resto de niños.
8. Movimientos finos: incapacidad para atar cordones de zapatos, abrochar botones, usar palillos, manos y pies torpes, mala habilidad manual.
Diario del Pueblo Online - Los niños que se vuelven "estúpidos" pueden deberse a un desequilibrio sensorial.