¡Nuevas regulaciones introducidas! ¿Cree usted que es necesario que los médicos participen voluntariamente en tratamientos en lugares públicos?
En situaciones de emergencia, necesitamos médicos profesionales que nos echen una mano. En la vida nos encontraremos con muchas emergencias inesperadas. Por ejemplo, se trata de un incendio repentino, una explosión o una enfermedad repentina. En este caso, la persona lesionada necesita ayuda profesional.
Aunque nos pondremos en contacto con el 120 lo antes posible, para estos heridos recibir tratamiento un minuto antes es como una carrera contra la vida. Por eso animamos a todos a tener algunos conocimientos de primeros auxilios.
Muchas veces, si un médico profesional se encuentra cerca, es una bendición disfrazada para los heridos. Los médicos consideran que su deber es salvar vidas y curar a los heridos, por lo que, cuando vean a los heridos, definitivamente tomarán la iniciativa de tratarlos lo antes posible.
La razón por la que muchos médicos tienen miedo de presentarse para recibir tratamiento es que muchos médicos todavía encuentran problemas innecesarios cuando solicitan activamente tratamiento en lugares públicos.
Uno de los mayores problemas es que los familiares de los heridos dudan de su profesionalidad. Generalmente, los médicos realizan este tipo de tratamiento voluntario en su propio tiempo y no pueden demostrar su identidad a tiempo en caso de emergencia. Sin embargo, el estado de algunas personas heridas es realmente grave e incluso después de un tratamiento de emergencia, sigue siendo imposible salvarles la vida. En este caso, los familiares lesionados sospecharán que los médicos involucrados en el tratamiento no son profesionales y luego trasladarán la responsabilidad a los médicos.
Esta situación no es desconocida en la sociedad. Por ello, muchos médicos no se atreven a dar un paso al frente para participar en este tipo de primeros auxilios ante esta situación. Por supuesto, esta es la naturaleza humana y no existen leyes ni regulaciones relevantes que requieran la participación en el tratamiento.
La introducción de las nuevas regulaciones garantiza que los médicos no tengan preocupaciones al participar en el tratamiento y evita razonablemente los problemas que encontrarán los médicos profesionales al participar en el tratamiento en lugares públicos.
Como todos sabemos, el trabajo de un médico es salvar vidas. En este tipo de emergencias, los médicos profesionales pueden participar en el tratamiento de inmediato, por lo que debemos reconocer sus conocimientos profesionales y creer que deben ser mejores que aquellos de nosotros que no tenemos conocimientos profesionales de primeros auxilios.
Su confianza y protección también protegen la vida de los heridos en emergencias. Con el tratamiento de estos médicos profesionales, creo que algunos heridos se salvarán.
En resumen, creo que eximir a los médicos de participar en primeros auxilios en lugares públicos es la mayor protección para los médicos y les da confianza.
Esta disposición es necesaria tanto desde la perspectiva del médico como del perjudicado. También esperamos que, al amparo de este reglamento, los médicos puedan participar en emergencias en lugares públicos sin ninguna preocupación.