Antecedentes de las actividades de la Convención de La Haya
Análisis jurídico: Convenciones y documentos adoptados por la Conferencia Internacional de Paz en La Haya, Países Bajos. Antes de la Primera Guerra Mundial, la carrera armamentista entre los países imperialistas era feroz, pero tenían que hacer gestos de paz. El gobierno zarista ruso envió dos avisos a los gobiernos de varios países abogando por la convocatoria de una conferencia de paz. La primera conferencia internacional de paz se celebró en La Haya y asistieron 26 países, entre ellos China, Rusia, el Reino Unido, Francia, Estados Unidos y Japón. La conferencia afirmó que tenía como objetivo "limitar los armamentos y mantener la paz", pero no logró ningún resultado en materia de limitación de armamentos. Sólo adoptó tres convenciones sobre la solución pacífica de disputas internacionales, leyes y reglamentos sobre guerra terrestre y tres declaraciones que prohíben el lanzamiento de bombas y explosivos desde globos. También decidió establecer un “Tribunal Permanente de Arbitraje”. Posteriormente se celebró la Segunda Conferencia de Paz de La Haya, en la que participaron representantes de 44 países. Se reconoció que los países no sólo no se habían desarmado desde la última reunión, sino que habían duplicado sus gastos militares. Sin embargo, la conferencia todavía no tomó ninguna medida sobre el desarme. Sólo discutió cómo luchar y adoptó hasta 10 convenciones sobre guerra naval y terrestre. Los 13 convenios y algunos documentos de declaración adoptados por las dos conferencias se denominan colectivamente Convenio de La Haya o Reglamento de La Haya.
Base jurídica: "Código Civil de la República Popular China"
Artículo 10 Las disputas civiles se manejarán de conformidad con la ley, si no hay ninguna disposición en la ley, las costumbres; podrán aplicarse, pero no se violará el orden público y las buenas costumbres.
Artículo 11 Si otras leyes tuvieren disposiciones especiales sobre las relaciones civiles, prevalecerán dichas disposiciones.
Artículo 12 Las actividades civiles dentro del territorio de la República Popular China se regirán por las leyes de la República Popular China. Si la ley dispusiera lo contrario, prevalecerán tales disposiciones.