La importancia de la promulgación de la Declaración de Derechos Británica
Estableció el estatus más alto del parlamento en la vida política nacional.
La "Declaración de Derechos" estipula claramente que el Parlamento debe reunirse periódicamente y disfrutar del derecho a discutir asuntos nacionales y la libertad de expresión. Los ciudadanos son libres de presentar peticiones. El rey no puede abolir leyes a voluntad, ni puede impedir su implementación, ni puede imponer impuestos. Un católico no podía ser rey de Inglaterra. Estas disposiciones establecieron el estatus más alto del parlamento en la vida política del país y formaron una monarquía constitucional.