¿Para qué se puede utilizar el sensor de presión ultrasónico patentado por Apple?
El número de patente otorgado a Apple por la Oficina de Patentes y Marcas de Estados Unidos es el No. 9.772.721, titulada "Detección de presión y tacto basada en ultrasonidos". Según el certificado de patente, se trata de un método para medir la presión de entrada mediante la emisión y detección de impulsos ultrasónicos. Más precisamente, el sistema mide la interacción entre dichos impulsos y el dedo del usuario.
En algunos ejemplos, los sensores de presión pueden ser elementos ultrasónicos dispuestos en filas y columnas, o múltiples sensores independientes dispuestos en una disposición preestablecida que pueden generar y recibir ondas ultrasónicas.
Primero se emiten ondas de ultrasonido al área de la pantalla o superficie interactiva que el dedo del usuario puede tocar. Las ondas o pulsos ultrasónicos pasan primero a través de la capa de detección o el panel de entrada de información y luego son reflejados por los dedos del usuario u otros objetos en contacto con la superficie.
Los pulsos reflejados se pueden utilizar para determinar la distancia entre el dedo (u otro objeto utilizado para introducir información) y el sensor, que luego se utiliza para calcular la presión. La atenuación, es decir, la cantidad de señal de pulso absorbida por el objeto tocado, también se puede utilizar para determinar la presión.
Por ejemplo, cuando tu dedo presiona con más fuerza la pantalla, la superficie de contacto aumenta y absorbe una mayor proporción de la información del pulso. Estos datos se pueden utilizar para mejorar la precisión de los cálculos de presión de entrada.
Según la patente de Apple, este conjunto de sensores de presión podría usarse con otros dispositivos de detección, como sensores táctiles capacitivos, que también pueden actuar como superficies reflectantes. Además de detectar la posición de entrada, la capa capacitiva también se puede utilizar para detectar los parámetros de presión de múltiples operaciones de prensado simultáneos.
Además, el dispositivo sensor de presión se puede colocar debajo o encima de la pantalla del dispositivo. Por ejemplo, si se coloca un sensor ultrasónico en la pantalla, puede hacerse transparente o colocarse en un lugar que no bloquee la vista del usuario. Este enfoque difiere del sistema de detección de presión táctil 3D que Apple utiliza actualmente en los iPhone, que apila múltiples capas de componentes debajo de la pantalla del teléfono inteligente.
Los sistemas táctiles 3D actuales pueden medir y localizar cambios sutiles de capacitancia entre el panel de vidrio del iPhone y la capa de sensor de metal duro incrustada en la matriz de retroiluminación del iPhone. Cuando el usuario presiona el panel de vidrio, la distancia entre el sistema y el sensor disminuye, lo que hace que la capacitancia disminuya.
Además, un único sensor capacitivo multitáctil situado encima de la pantalla mejora la precisión del tacto 3D. Cuando un usuario toca la pantalla o utiliza un gesto, el sensor puede detectar dónde presiona el dedo en la pantalla. Las vibraciones precisas generadas por el módulo de retroalimentación táctil Taptic Engine mejoran aún más la sensibilidad de 3D Touch.
Aunque 3D Touch puede producir resultados extremadamente precisos, su diseño es complejo y ocupa un valioso espacio dentro del dispositivo. Debido a consideraciones de espacio, Apple no utilizó un sistema de reconocimiento de huellas dactilares debajo de la pantalla en el iPhone X.
Antes del lanzamiento del iPhone X, había rumores de que Apple quería conservar el lector de huellas digitales como método de autenticación de respaldo cuando fallaba la solución de reconocimiento facial. Pero ahora parece que la compañía está eliminando completamente Touch ID en favor de Face ID.
Pero en cualquier caso, la patente obtenida hoy por Apple puede resolver los obstáculos técnicos que enfrenta el reconocimiento de huellas dactilares debajo de la pantalla, y parece ser más precisa y poderosa que la película.