Estoy comprometido. ¿Podemos vivir juntos?
En primer lugar, la diferencia entre compromiso y matrimonio
Un compromiso es un acuerdo de intención matrimonial alcanzado entre dos familias o amantes, lo que significa que ambas partes están dispuestas a casarse en algún tiempo en el futuro palacio. Sin embargo, el compromiso no es jurídicamente vinculante, es decir, incluso si las dos partes están comprometidas, siguen manteniendo sus identidades jurídicas independientes.
El matrimonio es un acto jurídico que marca el establecimiento formal de la relación entre marido y mujer y el disfrute y asunción de los derechos y obligaciones entre marido y mujer. En la mayoría de los países o regiones, el matrimonio debe registrarse conforme a la ley para obtener reconocimiento y protección legales.
2. Disposiciones legales sobre la convivencia
La convivencia significa que un hombre y una mujer viven juntos en nombre de no marido y mujer. Diferentes países o regiones tienen diferentes disposiciones legales sobre convivencia. En algunos países o regiones, la convivencia puede estar restringida o restringida por ley y requiere que se cumplan ciertas condiciones o se realicen ciertos procedimientos. En otros países, la cohabitación puede verse como una elección libre de los individuos sin mucha interferencia legal.
Sin embargo, no importa lo que diga la ley, la convivencia es una cuestión que requiere una cuidadosa consideración. Al involucrar todos los aspectos, como los sentimientos, los hábitos de vida y las condiciones económicas de ambas partes, ambas partes deben tener suficiente comprensión y confianza y estar dispuestas a trabajar duro por el futuro del otro.
En tercer lugar, opciones después del compromiso
Después del compromiso, ambas partes pueden elegir vivir juntas, pero esto debe basarse en la voluntad de ambas partes y en el consenso. Ambas partes deben comunicarse plenamente, comprender las ideas y expectativas de cada uno y tener en cuenta los posibles desafíos y riesgos. Al mismo tiempo, ambas partes deben respetar los deseos y elecciones del otro, y la convivencia no debe considerarse como un resultado inevitable o un requisito obligatorio después del compromiso.
En resumen:
Estar comprometidos no significa vivir juntos. La convivencia es una cuestión compleja que involucra elecciones personales, conceptos sociales, regulaciones legales y otros factores. Después de comprometerse, ambas partes deben considerar cuidadosamente si vivir juntas basándose en los principios del libre albedrío y el consenso. Al mismo tiempo, sin importar el estilo de vida que elijan, ambas partes deben respetar los deseos y elecciones del otro y sentar una base sólida para un futuro matrimonio.
Base jurídica:
Ley de Matrimonio de la República Popular China
El artículo 8 estipula:
Tanto los hombres como las mujeres que quieran casarse debe acudir al matrimonio en persona. El matrimonio se registra en la oficina de registro. Si el matrimonio cumple con las disposiciones de esta ley, se registrará y se expedirá un acta de matrimonio. Obtener un certificado de matrimonio equivale a establecer la relación entre marido y mujer. Si el matrimonio no ha sido registrado, deberá volver a registrarse.