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Falacias: cómo reconocer argumentos erróneos

En lógica, si las premisas de un argumento no respaldan su conclusión, se trata de un razonamiento defectuoso y este argumento se denomina "falacia". En términos generales, todos los errores de razonamiento pueden denominarse falacias.

Existen muchas causas y tipos de falacias en la vida.

En lógica, según las razones de las falacias, las falacias se pueden dividir en falacias de presuposición, falacias de coherencia y falacias de no reducción. Todos ellos son causados ​​por una aplicación inadecuada de los principios de argumentación.

Una falacia que finalmente conduce a un argumento falso debido a presuposiciones incorrectas del argumento se llama falacia de la presuposición. Entonces su principal desencadenante es que las premisas del argumento no han sido probadas adecuadamente. El siguiente es un ejemplo de la falacia de la presuposición:

Su premisa b es una proposición falsa. Entonces este argumento es una falacia presupuesta.

Las falacias de coherencia son simplemente falacias en las que no existe una relación coherente entre las premisas y la conclusión. Si utilizamos la simpatía y los puntos de vista autorizados como premisa del argumento, o malinterpretamos las opiniones de otras personas y otros medios para argumentar, y finalmente llegamos a una conclusión equivocada, todos tenemos que discutir.

Da un ejemplo positivo:

En el ejemplo anterior, el argumento de conclusión es una interpretación incorrecta de la premisa A, es decir, como Jim es un ladrón, todo lo que dice es mentira. Así que la conclusión de este argumento en realidad no es creíble.

Este argumento es causado por una interpretación incorrecta de la premisa y es una típica falacia de coherencia.

La falacia de la inducción inadecuada es una falacia provocada por el uso incorrecto de la inducción. El siguiente es un ejemplo típico de diferentes inducciones:

Este argumento se basa en las premisas a y b, pero en realidad es una aplicación incorrecta del método inductivo-deductivo, lo que finalmente conduce a una falacia.

A partir de la introducción y los ejemplos de las falacias anteriores, podemos encontrar que todas son un * * * problema. Es decir, si estos argumentos se dividen en silogismos, debe haber un argumento de silogismo que no cumpla con los requisitos básicos de un silogismo normal. Además, la condición de que todos los requisitos previos sean verdaderos es la falacia más común.

Así, un argumento complejo se descompone en varios silogismos deficientes. Mientras estos silogismos deficientes cumplan las condiciones de un silogismo, el argumento final también será un argumento correcto. Ésta es la forma más básica de comprobar si un argumento es correcto.