La importancia de la recomendación de David de ir a la escuela y leer libros ilustrados
"David va a la escuela" es un libro ilustrado que puede ayudar a los niños a formar reglas y establecer orden. En este libro, David está rodeado de otros niños. Debe aprender a llevarse bien con los demás y cumplir las normas y reglamentos de la escuela.
"David va a la escuela" cuenta la historia de los patrones de estudio de David en la escuela después de ingresar a la escuela. La imagen del maestro sólo aparece dos veces antes y después, y su cabeza no está dibujada. Una vez en la portada, se puso de pie con los brazos cruzados frente a su pecho. Su enojo y enojo provenían de las imágenes del libro. En otra ocasión, David finalmente fue castigado. Después de limpiar, la maestra tocó la cabeza de David y lo recompensó con una estrella de cinco puntas.
La imagen revela ternura, cariño y ánimo. En este libro, podemos ver la misma cultura universitaria en China y Occidente, como no llegar tarde a la escuela, levantar la mano antes de hablar en clase, hacer cola para comer, no comer en clase, escuchar atentamente en clase y no garabateando en el escritorio. Detrás de estos fenómenos se esconde una simple orientación valorativa y el respeto por los demás. Se trata de un acuerdo social que toda persona física debe respetar cuando crezca y se convierta en una persona social. Entonces, ¿cómo leerlo?
La maestra de David siempre decía: David no puede, no puede gritar, no puede empujar a la gente, no puede correr por el pasillo. Todos estos lenguajes tienen forma de oraciones negativas, lo que hace emerger la imagen de un maestro estricto y muy preocupado por el crecimiento de David. Preste atención a la autoridad de su tono al hablar y leer.
Llegar tarde parece ser cosa de niños traviesos. Mira la expresión de David: un poco avergonzado y un poco afortunado. El niño siempre se da muchas razones para llegar tarde, pero David no dice nada. Luego deje que el niño adivine a qué llega tarde.
David limpió su escritorio y parecía feliz porque asumió la responsabilidad de sus acciones, lo cual fue realmente loable. En ese momento, la maestra que había estado prestando atención le dio a David una estrellita. Aunque David hizo muchas cosas problemáticas en un día, la maestra decidió perdonarlo y animarlo de otra manera.
David por fin puede volver a casa. Verlo feliz es como nuestro hijo. Aunque existen muchas deficiencias, todavía necesitamos saber más sobre sus ventajas. Debemos tener un par de ojos que sepan descubrir fortalezas y animar a los niños a crecer felices.