Una mujer compró un producto financiero de un millón de dólares y demandó al China Guangfa Bank por una pérdida de 230.000 yuanes. ¿Quién cree que es el responsable?
Después del juicio, el tribunal dictaminó que el banco no cumplió con sus obligaciones debidas, lo que provocó que la mujer comprara a ciegas productos que eran gravemente incompatibles con su nivel de riesgo personal. Hubo una culpa evidente en este incidente: el banco no proporcionó pruebas para cumplir plenamente con sus obligaciones de divulgación de riesgos, o la mujer quedó exenta de responsabilidad al completar el cuestionario de riesgos. Por lo tanto, el tribunal dictaminó que el banco debería hacerse cargo de todas las pérdidas de la mujer, compensar la pérdida de aproximadamente 234.800 yuanes y pagar las pérdidas de intereses correspondientes a la mujer.
Creo que ambas partes tienen ciertas responsabilidades, pero debe prevalecer el criterio específico del tribunal. Los mercados financieros normales generalmente se adhieren al principio de que el vendedor es responsable y el comprador, cauteloso. Antes de comprar productos financieros, los consumidores deben tener una comprensión suficiente de los riesgos de los productos y asumir voluntariamente las responsabilidades de riesgo correspondientes, y deben ser conscientes de las pérdidas. Entonces, en este asunto, creo que los propios consumidores también tienen ciertas responsabilidades. Ella compró voluntariamente el producto sabiendo que era riesgoso, lo que significa que debe asumir la responsabilidad por la pérdida.
Es hasta cierto punto ilegal que los bancos recomienden productos financieros de alto riesgo a clientes prudentes. El personal del banco no ha cumplido con sus obligaciones debidas y no puede demostrar que ha informado plenamente a los consumidores sobre los riesgos. Desde una perspectiva jurídica, los bancos deben asumir las responsabilidades correspondientes. Cuando el tribunal conoció el caso, dictaminó que el banco debería soportar las pérdidas de riesgo correspondientes porque no había cumplido con sus obligaciones apropiadas y no podía probar que había cumplido con su obligación de revelar los riesgos.
El resultado de esta sentencia es juzgar esta cuestión desde una perspectiva jurídica, lo que significa que el banco tiene la responsabilidad absoluta en este incidente. Pero desde la perspectiva de la gente corriente que compra productos financieros, los consumidores también deberían tener ciertas responsabilidades. Pero cuando una persona siente que hay un conflicto con la ley, todo queda sujeto a la decisión judicial, y el banco debe hacerse cargo de la indemnización correspondiente.
La gestión financiera es arriesgada, así que tenga cuidado al comprar. Independientemente del tipo de producto financiero que le recomiende el personal del banco, debe tener suficiente conocimiento para juzgar si puede soportar las pérdidas correspondientes. De lo contrario, una vez que se produce una pérdida, es muy probable que afecte su vida personal.