Cómo reparar un matrimonio
1. Detente y piensa en tu familia y sus relaciones. ¿Cuándo aparecieron las grietas? ¿Cuándo cambiaron usted o la otra persona? Es algo que no quieres aceptar. Comprenda la causa y luego solucione el problema.
2. Habla bien. Habla amablemente con la otra persona. Las palabras duras pueden ser hirientes, incluso sin querer. El oyente también se sentirá herido. Disminuye tu tono. Habla más bajo y evita hacer ruidos fuertes.
3. El hogar no es más que tareas domésticas triviales, sino repetir estas cosas triviales. No es fácil. Sean considerados unos con otros. Tanto hombres como mujeres deberían tener algunos. Tampoco dé por sentado este intercambio mutuo. Tolerarse unos a otros.
4. Haz algunas sorpresas, flores y regalos. Cuando realmente no sepas qué comprar, simplemente dale dinero a la otra persona. Asegúrate de prestar atención a lo que suele gustarle a la otra persona, o al grado de admiración y expectativa por un determinado objeto. Elige la oportunidad adecuada para dársela a la otra persona.
Deja ir el pasado, no vuelvas a mencionarlo nunca más y deja de lado cualquier daño causado a personas correctas o incorrectas. No menciones nada que parezca ser una aventura, siempre y cuando no la haya ahora.
Además, no te dejes enredar en tus sentimientos, no importa si amas a alguien o no. Vivir juntos, ganar dinero, cuidar a los niños y a la familia, cuidarse unos a otros en asuntos triviales, no es fácil romper una familia.
Salir a trabajar puede ayudarte a controlar tus emociones. Trabajar duro en casa durante mucho tiempo hace que sea fácil quejarse y regañar. Sal y haz lo que quieras, incluso si ganas dinero, úsalo para contratar una niñera.