¡Cómo evaluar el sistema político británico! !
En comparación con las constituciones de otros países, la Constitución británica tiene las siguientes características:
1. La Constitución británica no está escrita. La mayor diferencia en la constitución británica es que nunca surgió como un código único, sino que consistió en varias leyes escritas y no escritas en diversas formas adoptadas en diferentes momentos desde los siglos XIII y XIV. Principalmente Carta Magna, Pacto Popular, Petición de Derechos, Declaración de Derechos, etc.
2. La Constitución británica es una constitución flexible. El proceso británico para formular y modificar documentos constitucionales es el mismo que el del derecho común, y su estatus legal es el mismo que el de otras leyes promulgadas por el Parlamento. La razón de este fenómeno es la codificación ilegal de la Constitución británica, pero la razón principal es que ningún parlamento puede obligar a su parlamento sucesor y ningún parlamento puede cambiar la legislación de su predecesor. De esta manera, es difícil formar un patrón unificado de restricciones o poderes constitucionales en la práctica política británica.
3. El papel de los hábitos políticos. Los hábitos políticos se forman en la práctica política a largo plazo y son reconocidos y aceptados por la gente. En Gran Bretaña los hábitos políticos son el resultado de siglos de esfuerzo consciente. Tales hábitos políticos incluyen: el rey debe nombrar al líder del partido mayoritario en la Cámara de los Comunes para formar el gobierno, y el gabinete debe ser responsable ante el parlamento y rendir cuentas al mismo. Estas costumbres fueron observadas tan escrupulosamente por los profesionales políticos que se convirtieron en una parte importante de la constitución británica.
Gran Bretaña no es un país con una descentralización estricta. El Primer Ministro puede considerarse la persona más poderosa de la política británica contemporánea. El Primer Ministro es el jefe de gobierno, presidente del Gabinete, miembro del Parlamento y el principal asesor político de la Reina. La relación entre el Primer Ministro, el Gabinete y el Parlamento es la siguiente:
Parlamento (partido mayoritario)
↓Collar↓
↓Mangas ↑
Primer Ministro-Líder-Gabinete-Líder-Gobierno
Comparado con otros países, el sistema político británico es a la vez antiguo y distintivo, lo que se refleja principalmente en su combinación de monarquía y democracia, y el "parlamentario". "sistema de gabinete parlamentario.
El sistema electoral británico consiste en que una única circunscripción se gana por mayoría relativa, lo que beneficia a los dos partidos principales. En términos generales, el partido principal que ganó las elecciones no obtuvo el 50% del total de votos, pero obtuvo más de la mitad de los escaños y gobernó solo. Esto es cierto ya sea que ganen los laboristas o los conservadores. Los liberales son los que más sufren. Obtuvo muchos votos, pero obtuvo muy pocos escaños parlamentarios, lo que resultó completamente desproporcionado con respecto a los votos. (El Partido Liberal se fusionó con el Partido Socialdemócrata, que se separó del Partido Laborista, en 1988 y pasó a llamarse Partido Liberal Demócrata).
El sistema bipartidista británico no es monolítico ni perfecto, y también tiene muchas deficiencias. En primer lugar, el partido gobernante resultante del sistema bipartidista no puede representar plenamente a la opinión pública. El sistema bipartidista británico está garantizado por el sistema electoral británico. El sistema electoral actual en el Reino Unido es un sistema de calificación de circunscripción única. El resultado está determinado por el número de escaños obtenidos en las elecciones generales, no por el número de votos. Esto crea un fenómeno paradójico: a veces el partido de oposición obtiene más votos que el partido gobernante. En segundo lugar, el sistema bipartidista es extremadamente perjudicial para el crecimiento y desarrollo de los partidos pequeños. El porcentaje de votos del pequeño partido en las elecciones fue desproporcionado con respecto al número de escaños que ocupaba en la Cámara de los Comunes. En tercer lugar, el sistema bipartidista hace que Gran Bretaña sea políticamente conservadora. Finalmente, el sistema bipartidista contribuye a la tendencia del público británico hacia la apatía política. Los dos principales regímenes monopolistas dejan sin opción a muchas personas a las que no les gustan los dos partidos. En las elecciones generales, algunas de estas personas votaron por partidos importantes que no odiaban, mientras que un número considerable de votantes no votó en absoluto. La baja participación es un fenómeno destacado en el Reino Unido. Si bien la participación tiene una tendencia a la baja en los países occidentales, el Reino Unido se encuentra entre los más bajos.
Las elecciones generales británicas de este año rompieron la tradición del sistema bipartidista.