Cuando estudiaba derecho, a menudo escuchaba la frase "expresión de significado". ¿Qué quiere decir esto?
El elemento central de los actos jurídicos civiles es la expresión de intención, por lo que la forma de los actos jurídicos civiles es la expresión de intención. El artículo 56 de los Principios Generales del Derecho Civil estipula que los actos jurídicos civiles pueden realizarse en forma escrita, oral u otras formas. Si la ley estipula el uso de formularios específicos, debe cumplir con la ley. En otras palabras, el portador de actos jurídicos civiles para la expresión de intención se puede dividir en dos formas: expreso y tácito. La importancia jurídica de distinguir entre derechos expresos e implícitos es que si un derecho se dispone mediante un acto jurídico civil, salvo que existan disposiciones especiales en la ley, sólo puede establecerse si las partes lo expresan expresamente.
La fuerza vinculante de la expresión de la intención es la eficacia de la expresión de la intención. Una vez establecida la expresión de la intención, el pensador queda obligado por ella, y el efecto jurídico no puede revocarse ni modificarse sin autorización salvo de conformidad con lo dispuesto en la ley. Una vez realizada la manifestación de intención, ésta afectará los intereses del expresante, de la contraparte o del tercero. Si la parte expresiva ofrece celebrar un contrato, la otra parte tendrá derecho a aceptarlo. La persona que renuncia al dominio de una cosa no constituye posesión ilícita ni enriquecimiento injusto si otra persona posee la cosa. Además, el hecho de que el expresante pueda retirar o cancelar la manifestación de intención también está relacionado con los intereses del propio expresante, de la contraparte y del tercero.