Red de Respuestas Legales - Derecho de patentes - Contenidos del sistema de responsabilidad del hogar

Contenidos del sistema de responsabilidad del hogar

Análisis jurídico: El sistema de responsabilidad por contratos domésticos es una forma de sistema de responsabilidad de la producción agrícola en el que los agricultores contratan tierras y otros medios de producción y tareas de producción a organizaciones económicas colectivas (principalmente aldeas y grupos) sobre una base familiar. Actualmente es un sistema económico básico en las zonas rurales de nuestro país. En la producción agrícola, los agricultores, como entidades económicas relativamente independientes, contratan y explotan tierras colectivas y otros medios de producción a gran escala (la práctica general es asignar tierras a los agricultores en proporción a la población o la fuerza laboral) y llevan a cabo la producción y la gestión de forma independiente. según el contrato. Sus ingresos operativos pertenecen a los agricultores, excepto una pequeña parte del impuesto pagado al colectivo y al Estado según el contrato. Como parte contratante, el colectivo proporciona principalmente servicios de producción a los agricultores, además de llevar a cabo la necesaria gestión coordinada y gestión de algunos productos agrícolas y secundarios.

Base jurídica: Artículo 8 de la "Constitución de la República Popular China". Las organizaciones económicas colectivas rurales implementan un sistema de gestión de dos niveles basado en la gestión de contratos domésticos y que combina la gestión unificada y la descentralización. Varias formas de economía cooperativa, como la producción, el suministro y la comercialización, el crédito y el consumo en las zonas rurales, son economías de propiedad colectiva de los trabajadores socialistas. Los trabajadores que participan en organizaciones económicas colectivas rurales tienen derecho a explotar tierras privadas, colinas privadas, negocios familiares secundarios y criar ganado privado dentro del ámbito prescrito por la ley. Varias formas de economías cooperativas, como la artesanía, la industria, la construcción, el transporte, el comercio y las industrias de servicios en ciudades y pueblos, son economías de propiedad colectiva de los trabajadores socialistas. El Estado protege los derechos e intereses legítimos de las organizaciones económicas colectivas urbanas y rurales y fomenta, orienta y ayuda al desarrollo de la economía colectiva.