Las personas mayores con discapacidad visual se quejan constantemente de que los perros guía orinan. ¿Por qué está “aumentando” la discriminación contra las personas con discapacidad?
La forma más efectiva de proteger a un grupo de personas es restringirlas con leyes y regulaciones. Sin embargo, actualmente existen leyes y regulaciones que protegen a las personas con discapacidad de la discriminación implícita. La razón por la que algunas unidades y departamentos pueden rechazar descaradamente o incluso dificultar las cosas a las personas con discapacidad es porque no existe protección legal para las personas con discapacidad cuando se enfrentan a una discriminación implícita, lo que deja a las personas con discapacidad sin posibilidad de quejarse.
Hoy en día, la gente sabe que además de la violencia convencional, también existe la violencia suave. El daño que causa la violencia suave al cuerpo y la mente de las personas es inconmensurable. El daño causado por la discriminación analógica y la discriminación implícita también es inconmensurable. Se puede decir que la discriminación invisible contra las personas discapacitadas es un dolor indescriptible, un tipo de dolor que atraviesa la piel. Después de todo, algunas personas discapacitadas no pueden expresarse normalmente. Superficialmente, no parece haber ningún defecto en la discriminación oculta, pero en realidad es una negativa a hacer las cosas. Después de todo, con el avance de la construcción del sistema socialista de nuestro país, no existen restricciones a la admisión, empleo, negocios, etc. de las personas con discapacidad, lo que significa que básicamente no existe discriminación explícita. Sin embargo, hay muchas personas detrás del primer grupo que ni siquiera sienten empatía.
En comparación con el enorme grupo de personas con discapacidad, hay muy pocas noticias sobre las personas con discapacidad. Por un lado, las personas con discapacidad no tienen voz; por otro, algunas personas con una gran conciencia jurídica todavía se ven limitadas por sus propios factores físicos. El desarrollo de la educación especial es lento y el nivel educativo de las personas discapacitadas es generalmente bajo. La conciencia jurídica de una persona es directamente proporcional a su nivel educativo. Además, como grupo vulnerable de la sociedad, las personas con discapacidad son propensas a sufrir complejos de inferioridad y algunas personas pueden tener la idea de resignarse al destino, lo que es cada vez más perjudicial para la protección de sus derechos legales.