Un niño de 1 año acompañó a su madre a comprar pasteles y una mujer extraña lo llevó a la azotea del edificio. ¿Cómo interpretarlo desde una perspectiva jurídica?
Según las disposiciones legales de nuestro país, los pacientes con enfermedades mentales están exentos de responsabilidad penal sólo en casos excepcionales. En la mayoría de los casos, los pacientes con enfermedades mentales siguen siendo responsables de sus acciones. Al mismo tiempo, deben ser castigados según su estado mental en el momento del delito. Si una persona no puede reconocer o controlar su propio comportamiento mientras se encuentra en estado de enfermedad y necesita pasar por procedimientos legales para confirmarlo, no asumirá responsabilidad penal como persona con enfermedad mental que no haya perdido por completo la capacidad de reconocer o controlar; su propia conducta también será castigada como delito, pero podrá recibir una pena más leve o reducir las penas.
Un comportamiento como el de esa mujer es muy cruel con los niños mayores de 1 año y tiene un impacto social extremadamente malo. Si no ocurre nada inesperado, es prácticamente seguro que la pena de muerte se ejecutará de inmediato.