¿Por qué cada vez más empleados dimitidos se quejan de sus antiguos empleadores?
El vómito suele ser un problema emocional porque en nuestro interior hay demasiada insatisfacción. Sería mucho mejor hablarlo y desahogarse.
Hay tres razones para este fenómeno:
1. Hay muy pocos empleados que pueden irse con calma, y los que pueden irse con calma no tienen tan mal carácter.
Dejar un trabajo no es algo malo. Cuando dejas una empresa y entras en la siguiente, tu vida puede ser diferente.
Es mejor partir con el corazón contento que con odio amargo. De hecho, no es gran cosa quejarse un poco de tu antiguo club. Los empleados actuales también se quejarán del sistema inhumano de la empresa. Sólo sea moderado y no afecte su estado de ánimo.
2. De hecho, algo anda mal con el viejo club. Las moscas no muerden huevos sin costura.
Debe existir un motivo para abandonar la empresa. El antiguo jefe hizo algo malo; de lo contrario, ¿cómo podrían quejarse los empleados que dimitieron?
Por eso, cualquier empresa debe hacer su propia introspección después de que un empleado deja la empresa. ¿Por qué no podemos retener a la gente?
3. Los empleados que dimiten no pueden mirar el problema objetivamente.
El modo de quejas locas es muy exagerado. Como empleado resignado, debes analizar los problemas objetivamente. No culpes al mundo exterior por todo lo que encuentres. No busques las razones dentro de ti mismo. Esto impedirá un crecimiento rápido.