Red de Respuestas Legales - Derecho de bienes - Cómo mantener la salud durante el embarazo 6 formas de mantener la salud durante el embarazo

Cómo mantener la salud durante el embarazo 6 formas de mantener la salud durante el embarazo

Contenido método 1: siga los consejos del médico 1 y elija al obstetra y ginecólogo adecuado. 2. Examen físico periódico. 3. Haga ejercicio con regularidad. 4. Asegúrese de dormir lo suficiente. 5. Tomar suplementos nutricionales prenatales. 6. Cuida tu peso. 7. Visite al dentista con regularidad. Método 2: Cambie su dieta 1. Consuma suficientes alimentos saludables. 2. Consuma más frutas y verduras ricas en vitamina C. Come más proteínas. 4. Consuma mucho calcio. 5. Consuma alimentos que contengan ácido fólico. 6. Consuma alimentos que contengan zinc. 7. Consuma suficiente hierro. 8. Toma suplementos de aceite de pescado. Método 3: Evite alimentos y bebidas nocivos 1. No bebas. 2. Deja de consumir cafeína. 3. No comas carne cruda o poco cocida. 4. No comas pescado con alto contenido de mercurio. 5. Evite comer queso sin pasteurizar. Método 4: Cambie su estilo de vida 1. Reciba la última vacuna antes del embarazo. 2. Dejar de fumar. 3. Manténgase alejado de todas las drogas. 4. No utilice jacuzzis, saunas o baños de vapor. 5. Evite la exposición a toxinas ambientales. 6. Pídele a alguien que te ayude a limpiar la caja de arena. Método 5: Cómo afrontar los cambios en las funciones corporales 1. Comer porciones más pequeñas con más frecuencia puede aliviar las náuseas y los vómitos. 2. Haga ejercicio con regularidad y coma fibra para aliviar el estreñimiento. 3. Pregúntele a su médico acerca de los medicamentos para tratar las hemorroides. 4. Esté preparado para orinar con frecuencia o tener incontinencia. Método 6: Cuida bien tus emociones 1. Afronta los cambios de humor. 2. Comprender los síntomas de la depresión. 3. Cuídate. 4. Pide apoyo. El embarazo es una prioridad absoluta en la vida. Para mantenerse segura durante el embarazo, debe hacer todo lo posible para mantenerse saludable. Mantenerse saludable durante el embarazo es importante para su salud física y mental y la de su bebé en crecimiento. Asegúrate de comer sano, mantenerte activo, cuidar tus emociones y realizar los cambios necesarios en tu estilo de vida. ¡Simplemente tomar las decisiones más saludables puede mejorar significativamente la salud futura de su hijo!

Método 1: Seguir los consejos del médico.

1. Elija el obstetra adecuado. Tómese el tiempo para elegir el obstetra-ginecólogo adecuado, ya que estará en estrecho contacto con él durante los próximos meses. Pídale a su médico de cabecera que le recomiende un obstetra. Un obstetra-ginecólogo puede brindarle una atención más profesional y ayudarla a dar a luz a su bebé. También puedes preguntarle a tus amigos. No es necesario elegir un médico al que contactar primero. Puede consultar a varios médicos y elegir aquel con el que se sienta más cómodo y en el que confíe más. Haga preguntas a su médico, como su experiencia y si se sentiría cómoda elaborando su propio plan de parto.

Si está interesada en opciones de parto no tradicionales, como el parto en casa o el parto en el agua, considere consultar a un guía o una partera.

2. Exploración física periódica. Las visitas periódicas a su obstetra, médico de familia o partera certificada durante el embarazo pueden mantener su seguridad y la de su bebé en crecimiento. Una vez que sepa que está embarazada, decida estarlo o sospeche que está embarazada, debe realizarse un control prenatal lo antes posible. Primero puede acudir al médico de cabecera con el que tiene contacto frecuente y luego pasar a un especialista para que lo examine a medida que avanza el embarazo. Siempre y cuando el médico confirme que tienes un embarazo normal, deberás realizar controles prenatales según el siguiente cronograma: controles cada 4 semanas hasta la semana 28 de embarazo.

A partir de las 28 semanas, controle cada 2 semanas hasta las 36 semanas de embarazo.

A partir de las 36 semanas, comprobar una vez por semana. Su médico también puede pedirle que se haga chequeos más frecuentes.

3. Haz ejercicio con regularidad. El aumento de peso abdominal, las náuseas matutinas y los dolores musculares durante el embarazo pueden parecer como si las personas no quisieran hacer ejercicio. Sin embargo, mantenerse activa durante el embarazo es bueno para su salud y la de su bebé. El ejercicio regular favorece un parto sin problemas, facilita la pérdida del exceso de peso, permite que el cuerpo se recupere más rápido después del parto y promueve el crecimiento saludable del feto. Trate de hacer 30 minutos de ejercicio de bajo impacto todos los días, como nadar, andar en bicicleta, levantar pesas o yoga. Caminar también es un gran ejercicio. Evite los deportes de alto impacto, como las carreras de larga distancia y el entrenamiento en intervalos de alta intensidad, y evite deportes como el fútbol, ​​el rugby y el fútbol americano, ya que su cuerpo es propenso a sufrir lesiones.

El sobrecalentamiento puede ser peligroso para una madre para su bebé, así que tenga a mano un ventilador y agua fría para mantenerlo fresco.

Consulta siempre a tu médico antes de cambiar tu programa de ejercicios o comenzar uno nuevo.

4. Garantizar un sueño adecuado. Asegurarse de dormir lo suficiente y de calidad durante el embarazo le dará a su cuerpo tiempo para ayudar a que su bebé se desarrolle, lo que la hará sentir más cómoda durante el embarazo. Planee dormir al menos 8 horas por noche, con una siesta alrededor de las 3 p. m. Acostarte a tiempo todas las noches te ayudará a ajustar tus ritmos de sueño y despertar, permitiéndote dormir más profundamente y más tranquilamente. Dormir sobre el lado izquierdo puede ayudar a reducir la presión sobre la espalda. Otras posiciones pueden comprimir las venas principales y cortar el suministro de sangre.

No tomes pastillas para dormir durante el embarazo a menos que estén aprobadas y recetadas por tu médico.

5. Tomar complementos nutricionales prenatales. Tomar medicamentos, suplementos y vitaminas todos los días no es fácil, pero es muy útil para reducir la aparición de muchos defectos congénitos. Las mujeres deben tomar 600 microgramos de vitaminas prenatales todos los días después del embarazo. Las vitaminas prenatales son ricas en nutrientes como el ácido fólico y el hierro. El ácido fólico y el hierro desempeñan un papel importante en el desarrollo temprano del bebé y reducen el riesgo de complicaciones como la espina bífida y el nacimiento prematuro y los defectos de nacimiento. Pregúntele a su médico acerca de un suplemento adecuado para usted. La mayoría de las mujeres embarazadas necesitan una ingesta adicional de: ácido fólico.

Hierro

Zinc

Calcio

6. Debe aumentar de peso durante el embarazo, pero aumentar de peso puede tener un gran impacto en la salud de su bebé y la suya. La cantidad de peso que debe aumentar una persona depende de su peso antes del embarazo y de su índice de masa corporal (IMC). Para saber tu peso ideal durante el embarazo, primero debes calcular tu índice de masa corporal. Puede hacer los cálculos con su médico y discutir su peso saludable. Utilice el índice de masa corporal y el peso como referencia para calcular cuánto peso debe ganar. Las mujeres con bajo peso (índice de masa corporal inferior a 18,5) deberían ganar entre 13 y 18 kg.

Las mujeres de peso normal (índice de masa corporal entre 18,5-24,9) deberían ganar entre 11 y 16 kg.

Las mujeres con sobrepeso (índice de masa corporal entre 25-29,9) deberían añadir entre 7 y 11 kg.

Las mujeres obesas (índice de masa corporal superior a 30) deben ganar entre 5 y 9 kg.

7. Visitar al dentista periódicamente. El cuidado dental es especialmente importante para las mujeres embarazadas porque el aumento de la producción de estrógeno y progesterona en el cuerpo durante el embarazo puede provocar gingivitis y enfermedades de las encías, lo que hace que las encías sangren con frecuencia, se vuelvan sensibles y se hinchen. Durante el embarazo, se debe visitar al dentista cada 3-4 meses para mantener la salud bucal. Cepíllese y use hilo dental con regularidad. Algunos lugares ofrecen tratamientos dentales gratuitos o con descuento. Es posible que desee consultar a su médico de atención primaria para obtener esta información.

Método 2: Cambia tu dieta

1. Consume suficientes alimentos saludables. Comer alimentos nutritivos puede reducir el riesgo de problemas de salud graves para usted y su bebé. A menudo decimos "una mujer embarazada come dos suplementos", lo que fácilmente recuerda a las personas que deben seguir comiendo durante todo el día. En realidad, sin embargo, sólo necesitas 300 calorías adicionales por día por cada feto. Por lo tanto, si solo está embarazada de un hijo, necesitará comer 300 calorías adicionales al día, si está embarazada de gemelos, necesitará comer 600 calorías adicionales y si está embarazada con trillizos, necesitarás comer 900 calorías adicionales. Estas cifras variarán ligeramente según el peso antes del embarazo, pero siguen siendo de alrededor de 300 calorías por feto.

Debes obtener tus calorías de alimentos saludables, no de comida chatarra o comida rápida.

El objetivo principal de comer más es proporcionarte a ti y a tu bebé en crecimiento vitaminas y minerales.

2. Consumir más frutas y verduras ricas en vitamina C. Se recomienda que las mujeres embarazadas consuman 70 mg de vitamina C al día, preferentemente a partir de alimentos naturales en lugar de tomar fármacos o suplementos. Trate de comer de 3 a 4 porciones de estos alimentos todos los días. Los cítricos, la papaya, las fresas, el brócoli, la coliflor, los tomates, las coles de Bruselas y los pimientos rojos son ricos en vitamina C.

3. Consume más proteínas. La proteína es importante para la salud en todo momento. Las mujeres embarazadas deben consumir de 2 a 3 porciones de proteínas al día. La proteína es esencial para la producción de sangre y el crecimiento celular de usted y su bebé. Buenas fuentes de proteínas saludables incluyen huevos, yogur sin suero, frijoles, tofu, mantequilla de maní y carnes magras.

4. Ingiere mucho calcio. El calcio es muy importante para las mujeres embarazadas, pero muchas mujeres embarazadas no consumen suficiente calcio. Aunque los suplementos prenatales suelen contener pequeñas cantidades de calcio, debes consumir 1000 miligramos adicionales de calcio al día. Complementar más calcio puede promover el desarrollo de los huesos y nervios de su bebé. Buenas fuentes de calcio incluyen el yogur, el queso duro, la leche y las espinacas.

No olvides tomar vitamina D para favorecer la absorción del calcio. La vitamina D suele encontrarse en alimentos que contienen calcio, así como en cereales y panes.

5. Consume alimentos que contengan ácido fólico. Si bien los suplementos prenatales ya contienen ácido fólico, también debes obtenerlo de forma natural de los alimentos para obtener mejores resultados. El ácido fólico es muy importante para la hematopoyesis y la función enzimática del bebé. Los alimentos que contienen folato incluyen la col rizada, el repollo, las espinacas, la calabaza, los frijoles, las nueces y los guisantes. Estos alimentos contienen otros nutrientes que son beneficiosos para el organismo, así que trate de comer 1-2 porciones todos los días.

6. Consuma alimentos que contengan zinc.

Durante el embarazo, debes consumir entre 11 y 13 mg de zinc todos los días, así que recuerda comer alimentos que contengan zinc. Estos incluyen carne de res, cerdo, aves (pollo y pavo), anacardos, almendras, maní, cereales para el desayuno fortificados, yogur y queso.

7. Consume suficiente hierro. Usted y su bebé necesitan hierro para producir células sanguíneas. La mayoría de los suplementos prenatales ya contienen hierro, pero como la mayoría de los nutrientes, es mejor obtener hierro de forma natural de los alimentos en lugar de suplementos. Los alimentos ricos en hierro incluyen carnes rojas, espinacas y cereales integrales fortificados con hierro, como algunos panes y cereales. Consuma al menos 1 porción de este alimento rico en hierro todos los días.

8. Tomar suplementos de aceite de pescado. Los ácidos grasos omega-3 son esenciales para el desarrollo del cerebro y los ojos del bebé. Los ácidos grasos omega-3 suelen proceder de pescados, como el atún, las sardinas, el salmón y el salmón. Sin embargo, durante el embarazo, es posible que desees tomar suplementos de aceite de pescado en lugar de comer pescado para reducir la ingesta de mercurio. Puede consumir hasta 300 mg de ácidos grasos omega-3 al día.

Método 3: Evitar alimentos y bebidas nocivas.

1. No beber. Las mujeres embarazadas nunca deben beber alcohol ya que el alcohol puede causar muchos defectos de nacimiento y complicaciones. Beber alcohol aumenta en gran medida el riesgo de aborto espontáneo o muerte fetal, es más probable que el bebé tenga trastornos del desarrollo en el futuro y aumenta el riesgo de síndrome de alcoholismo fetal. Evite la exposición al alcohol durante el embarazo para evitar estas complicaciones. Si es necesario, puede hablar con un terapeuta especializado en consumo de drogas y alcohol. Si no sabes que estás embarazada y accidentalmente bebes alcohol, no te preocupes demasiado. Las complicaciones por el alcohol generalmente no ocurren siempre que se abstenga de consumir alcohol.

Algunos médicos y mujeres piensan que está bien tomar un vaso pequeño de vino de vez en cuando durante el embarazo. Puede discutir esto con su médico.

2. Dejar de consumir cafeína. Es posible que le guste tomar café, té y refrescos, pero siempre que contengan cafeína, pueden ser perjudiciales para su bebé. Es más probable que el consumo de cafeína durante el embarazo provoque abortos espontáneos y complicaciones en el parto. Es mejor suspender la cafeína por completo, pero algunos médicos consideran seguro consumir no más de 200 miligramos de cafeína por día. Esto equivale a 1 taza de 300 ml de café.

Procura beber café, té y refrescos descafeinados o descafeinados. En cuanto a los alimentos con cafeína como el chocolate, está bien consumirlos con moderación porque su contenido en cafeína suele ser muy bajo.

3. No comer carne cruda o poco cocida. La carne cruda poco cocida a menudo provoca enfermedades transmitidas por los alimentos, como la toxoplasmosis y la listeriosis. Estas enfermedades son muy peligrosas para el bebé en desarrollo y es mejor no comer alimentos que puedan contener estos gérmenes. No coma mariscos, pescado crudo (como sushi y sashimi), carne poco cocida o quemada ni huevos crudos.

4. No comer pescado con alto contenido en mercurio. Los metales pesados ​​como el mercurio y el plomo son muy dañinos para los bebés en crecimiento y una exposición excesiva puede incluso ser fatal. Algunos pescados tienen un contenido particularmente alto de mercurio y las mujeres embarazadas no deben consumirlos, como el pez espada, el tiburón, la caballa del Atlántico, los filetes de atún y el blanquillo. Sin embargo, el atún, el salmón, el fletán y el bacalao enlatados todavía se pueden consumir durante el embarazo. Incluso el pescado seguro no debería consumirse en grandes cantidades. Simplemente coma pescado una o dos veces por semana durante el embarazo.

5. Evite comer queso sin pasteurizar. El queso blando es delicioso, pero el queso fresco no pasteurizado puede contener bacterias que pueden causar muchas complicaciones en el envío. Por ello, se recomienda a las mujeres embarazadas que no consuman este queso. Los quesos frescos no pasteurizados incluyen el brie, el feta, el queso de cabra, el camembert y el queso azul. En cuanto a los quesos duros como el cheddar, el queso duro suizo y el queso Havarti, son seguros para comer.

Método 4: Cambia tu estilo de vida

1. Recibe la última vacuna antes del embarazo. Lo mejor es consultar a un médico antes de quedar embarazada y recibir todas las vacunas necesarias. Informe a su médico actual su historial médico completo para confirmar si necesita vacunas. Si es necesario, vacúnese lo antes posible. La vacuna MMR (sarampión, paperas, rubéola) y la vacuna TDaP (tétanos, difteria, tos ferina) deben vacunarse antes del embarazo.

Puedes vacunarte contra la gripe durante el embarazo.

Si tienes alguna duda sobre la vacunación, puedes consultar a tu médico.

2. Dejar de fumar. En general se recomienda no fumar ningún cigarrillo ya que es muy perjudicial para los pulmones. Especialmente las mujeres embarazadas, no importa qué cigarrillo fumen, sus bebés los inhalarán. El bebé puede absorber la nicotina y el tabaco en la sangre, lo que aumenta las posibilidades de muerte fetal, aborto espontáneo y bajo peso al nacer. No fumar, incluidos cigarrillos, cigarrillos electrónicos, puros y marihuana. Los estudios han encontrado que los bebés que fuman durante el embarazo también fumarán durante mucho tiempo cuando crezcan.

También debes evitar el humo de segunda mano.

3. Manténgase alejado de todas las drogas. Cualquier tipo de droga es perjudicial para un bebé en crecimiento, especialmente las drogas ilegales. Si toma drogas recreativas, es casi seguro que el bebé tendrá defectos de nacimiento o complicaciones debido a los efectos dramáticos que tienen en su cuerpo y función cerebral. Si una madre es adicta a las drogas y continúa consumiéndolas durante el embarazo, le transmitirá la adicción a las drogas a su bebé. Los recién nacidos pueden volverse adictos a las drogas y experimentar los mismos síntomas de abstinencia que los adultos. Si toma drogas recreativas o es adicto a ellas, puede visitar un centro de rehabilitación de drogas local. Si encuentra alguna dificultad, puede buscar ayuda de su médico. Le ayudarán a encontrar un centro de rehabilitación de drogas.

Por el bien de la buena salud, no tomes medicamentos después del parto.

4. No utilices jacuzzis, saunas o baños de vapor. La temperatura corporal excesiva es muy peligrosa para el feto y puede afectar el desarrollo y provocar defectos de nacimiento. Ducharse o bañarse con agua tibia está bien, pero la exposición prolongada a altas temperaturas puede causar problemas graves, especialmente en el primer trimestre. Manténgase alejado de ambientes con temperaturas superiores a los 38 grados centígrados. Si realmente no tienes otra opción, limítate a un máximo de 10 minutos.

5. Evite la exposición a toxinas ambientales. Las mujeres embarazadas pueden estar expuestas a algunas sustancias químicas y toxinas, pero son especialmente peligrosas para las mujeres embarazadas. Los agentes de limpieza, los productos químicos agresivos, los metales pesados ​​como el mercurio y el plomo y los agentes biológicos como el asbesto pueden causar defectos de nacimiento y complicaciones. Si trabaja o vive en un área donde puede estar expuesto a estas toxinas, trate de evitar la exposición a ellas. Puede realizar cambios en su estilo de vida si es necesario, como solicitar que lo transfieran a un trabajo diferente.

6. Deja que otros limpien el cubo de basura por ti. Toxoplasma gondii es una enfermedad infecciosa muy peligrosa que puede transmitirse fácilmente a mujeres embarazadas a través de las cajas de arena para gatos. Las madres infectadas no experimentan síntomas y, sin saberlo, transmiten estos síntomas a sus bebés, causando daños cerebrales y oculares graves. Si tienes una caja de arena para gatos en casa, intenta no tocarla y deja que un amigo o familiar se encargue de limpiarla periódicamente. Durante el embarazo, limpie a fondo la caja de arena de la gata al menos una vez al día.

Si debes limpiar la caja de arena, asegúrate de usar guantes y lavarte las manos después.

Método 5: Hacer frente a los cambios en las funciones corporales.

1. Realizar comidas pequeñas con frecuencia puede aliviar las náuseas y los vómitos. Muchas mujeres embarazadas experimentan náuseas y vómitos, especialmente en el primer y segundo trimestre. Realizar comidas pequeñas y frecuentes puede ayudar a aliviar las náuseas y los vómitos. Puedes comer pan, patatas, manzanas y otros alimentos para neutralizar el ácido del estómago. El jengibre también puede ayudar a aliviar las náuseas.

2. Haz ejercicio regularmente y come fibra para aliviar el estreñimiento. El estreñimiento es propenso a ocurrir en el segundo y tercer trimestre del embarazo porque hay una gran cantidad de progesterona en la sangre, lo que resulta en una contractilidad gastrointestinal insuficiente. Durante el embarazo, puede hacer más ejercicio, beber más agua y comer más alimentos ricos en fibra para ayudar a aliviar el estreñimiento. Adquiera el hábito de ir al baño a tiempo.

3. Consulta con tu médico los medicamentos para tratar las hemorroides. El estreñimiento y las deposiciones forzadas a menudo causan hemorroides. El embarazo también puede comprimir las venas debajo del útero, lo que aumenta la presión arterial y provoca hemorroides. Pregúntele a su médico si puede usar un anestésico local para aliviar la hinchazón y el dolor causado por las hemorroides.

4. Esté preparado para orinar con frecuencia o tener incontinencia. Muchas mujeres embarazadas tienen que ir al baño con frecuencia o descubren que no pueden retener la orina como antes. Para solucionar estos problemas, puede descansar regularmente y dormir sobre el lado izquierdo para mejorar la función renal. También puedes hacer ejercicios de Kegel para aumentar el tono de tus músculos perineales. Si le duele la vejiga al orinar, debe consultar a un médico para confirmar si tiene una infección del tracto urinario.

Método 6: Cuida tus emociones.

1. Hacer frente a los cambios de humor. Durante el embarazo, las hormonas aumentan en el cuerpo. Es posible que rías y llores con frecuencia, lo que te hace sentir incómodo. No te preocupes, todo está bien. Sólo hay que encontrar formas saludables de afrontar los cambios de humor. Date tiempo para procesar tus emociones. No te fuerces a reír cuando te sientas deprimido. ¡Permítete llorar unos minutos!

Tómate un descanso. Si algo te molesta, aléjate. Da un paseo por el barrio o lee una revista hasta que te sientas mejor.

2. Comprender los síntomas de la depresión. Muchas mujeres sufren depresión durante el embarazo. Presta atención a si presentas síntomas como ansiedad, irritabilidad e insomnio. Consulte a su médico tan pronto como note estos síntomas. Pueden darle consejos o derivarlo a un profesional de salud mental. No tengas miedo de pedir ayuda a otros.

3. Cuídate. Sé amable contigo mismo. No se culpe por los cambios de humor o la fatiga. Date tiempo para relajarte. Tómese un tiempo todos los días para hacer algo que disfrute, como leer un libro o mirar su programa de televisión favorito.

Toma una siesta si es necesario.

Deshazte de los pensamientos negativos. Por ejemplo, si le preocupa su imagen corporal, recuerde que su cuerpo es exactamente como debería verse cuando está embarazada.

4. Pide soporte. Durante el embarazo, tu cuerpo y tu estado de ánimo sufrirán muchos cambios, por lo que debes tener a alguien cerca que te apoye. No tengas miedo de apoyarte en familiares, amigos o pareja. Almorcé con amigos. Pueden hablar con ella sobre sus ansiedades o cotillear juntos para relajarse.

Pídele a tu pareja que haga más tareas del hogar. Si sueles cocinar, pídeles que te preparen la cena algunas veces a la semana.

¡No rechaces la ayuda de otros!

Consejo: Si tienes dolor de espalda, siéntate en una silla con respaldo. Mantener una buena postura corporal puede aliviar el dolor de espalda.

El dolor en los pezones durante el embarazo es normal. Hay cosas que puedes hacer para aliviar el dolor en los pezones.

Se pueden consumir snacks mientras se toman vitaminas prenatales para evitar las náuseas.

Consulta siempre a tu médico antes de advertir sobre cambios en tu estilo de vida. Si experimenta algún comportamiento o actividad extraño durante el embarazo, comuníquese con su médico de inmediato.