La abuela estaba comiendo las naranjas que yo pelaba, pensando en lo que me decía con una sonrisa.
La abuela será muy dulce cuando coma las naranjas que pelas. Muy feliz. Te amaré desde el fondo de mi corazón. Él te contará algunas cosas íntimas. También diré algunas palabras de amor para ti. O palabras de agradecimiento. Debido a que las personas necesitan más cuidados de sus descendientes cuando envejecen, debemos cuidar a los ancianos. Que los mayores se sientan felices en su vejez. Un anciano no se distingue por lo mucho que come o por lo bien que viste, sino por sus hijos. O el joven suele ir a casa a verlo. Las cosas buenas le llegan a la gente buena. Disfruta de la felicidad familiar.
A los ojos de los mayores, el cuidado y amor de sus hijos por sus mayores y su desempeño maduro hará que los mayores se sientan muy gratificados y felices por su crecimiento.